Los otros futbolistas sancionados por consumo de drogas

Guardiola, Davids, Stam y Couto dieron positivo en nandrolona el mismo año, Kolo Touré en pastillas para el adelgazamiento y Paul Merson tuvo incluso que ser ayudado por la Federación inglesa. La sanción impuesta por la FIFA al capitán de la selección peruana, Paolo Guerrero, que estará un año sin competir por dar positivo en cocaína el pasado octubre, recuerda a otros futbolistas castigados por combinar consumo de drogas y fútbol profesional. 

Dani Benítez, dos años por consumo de cocaína y marihuana

El futbolista del AEK Limassol chipriota fue sancionado entre 2014 y 2016 por dar positivo en cocaína y marihuana tras un Granada-Betis. Benítez lo reconoció y el Granada terminó por rescindir el contrato de uno de los pesos pesados de aquel vestuario. Cuando volvió a los terrenos de juego lo hizo con la camiseta del Racing de Ferrol, en Segunda B, para disputar una veintena de partidos antes de emprender el rumbo a Chipre. 

Kolo Touré y sus pastillas adelgazantes de su mujer

En marzo de 2011, Touré jugaba en el Manchester City, que había desembolsado casi 20 millones por el central dos años antes. El costamarfileño no consiguió pasar un control rutinario y la FA le sancionó, en mayo, con 6 meses sin saltar al césped. El técnico del Arsenal, Arséne Wenger, que tuvo a Touré a sus órdenes durante 7 temporadas, reconoció que el defensa tomó unas pastillas adelgazantes de su mujer por los problemas de peso que le acompañaron durante su carrera. "Es un chico familiar y responsable, no creo que haya intentado hacer nada malo", dijo Wenger entonces.

El cuerpo de Pep Guardiola producía más nandrolona de lo habitual

En su incursión en el fútbol italiano, el técnico del Manchester City jugó en el Brescia, en dos etapas, y en el Roma. Guardiola dio positivo en nandrolona después de dos partidos, contra Piacenza y tras un derbi contra el Lazio. La Federación italiana le impuso una suspensión de 4 meses sin jugar, 2.000 euros y 7 meses de cárcel. Junto a su abogado, el ex entrenador del FC Barcelona comenzó una odisea para demostrar su inocencia: presentó informes avalados por el entonces miembro de la Comisión Antidopaje del COI, Jordi Segura, que señalaban que su cuerpo producía más nandrolona, una sustancia que influye en el crecimiento muscular. En 2007, el Tribunal de Apelación de Brescia le absolvió. Su abogado en Italia, Tomaso Marchese, fue contundente al respecto: "Pep no se ha dopado nunca". 

Edgar Davids pasó cuatro meses sin jugar con la 'Vecchia Signora'

El mediocentro holandés también dio positivo en nandrolona en 2001, pero a diferencia del de Guardiola, su cuerpo no la producía de forma natural. Davids, internacional con Holanda en 74 ocasiones, estuvo 4 meses sin poder vestir la camiseta del Juventus. 

Jaap Stam: de 5 meses sancionado a cumplir solo 1

El compañero de Davids en la 'Oranje' dio positivo en nandrolona también en 2001, poco después de su fichaje por el Lazio. El espigado central holandés fue sancionado 5 meses sin competir, aunque el Tribunal de Apelación redujo el castigo a solo 1 mes. La progresión de Stam no se vio afectada: jugó 5 temporadas más en Italia (3 en Roma y 2 en Milán) para poner fin a su carrera en 2007 como futbolista del Ajax.

Fernando Couto, 9 meses por nandrolona

El fútbol italiano y la nandrolona tenían una extraña relación en 2001. Otro caso más a añadir al listado: Fernando Couto fue sancionado durante 9 meses cuando era jugador y compañero de Jaap Stam en el Lazio .El central portugués negó haber consumido dicha sustancia, pero el contranálisis confirmó el positivo de Couto. Tras la sanción, jugó otros 7 años en Italia, con la camiseta del Lazio (hasta 2005) y tres temporadas con la elástica del Parma. 

"Me he gastado todo el dinero en cocaína y prostitutas"

Son las palabras con las que Sasa Curcic puso fin a su carrera deportiva con 29 años. Nunca fue sancionado y ni siquiera llegó a dar positivo mientras era futbolista, pero sus declaraciones y su corta trayectoria causaron impacto en la Premier League. Curcic estaba llamado a ser uno de los mayores talentos yugoslavos, pero nunca llegó a demostrar el fútbol que el mediocentro presumía atesorar en sus botas. 

Mark Bosnich consumía 10 gramos de cocaína al día

Mark Bosnich fue un portero australiano que jugó en el Chelsea entre 2001 y 2003. El guardameta dio positivo en cocaína en un control realizado en 2002 y el conjunto de Stamford Bridge le sancionó durante 9 meses, para rescindir su contrato en el verano de 2003. Tras 5 años sin encontrar equipo, Bosnich especuló con su retirada, hasta que finalmente se enroló en las filas del Central  Coast Mariners de su país natal, para fichar al año siguiente por el Sidney y colgar definitivamente las botas en 2009. Bosnich aseguró que consumía 10 gramos diarios de cocaína y reconoció haber disparado a su padre con un rifle bajo los efectos de la droga. 

Paul Merson tuvo que pedir ayuda a la Federación

En 1994, el centrocampista del Arsenal admitió su adicción al consumo de cocaína, alcohol y al juego. Merson era uno de los jugadores más talentosos de la Premier e internacional absoluto con Inglaterra. El '10' gunner recurrió a la Federación inglesa, que lo introdujo en un programa de rehabilitación. En 1995 volvió a los terrenos de juego y siguió en el Arsenal dos años más. Tras su retirada, en 2011 protagonizó un incidente al dar positivo en un control de alcoholemia después de tener un accidente con su coche. En la actualidad, es colaborador del medio británico Sky Sports. 

Mutu, el jugador al que "cazó" Mourinho

El delantero Adrian Mutu fichó por el Chelsea en 2003 a cambio de 22,5 millones de euros. Tuvo problemas con Claudio Ranieri y con su sucesor, José Mourinho, que llegó a Stamford Bridge en la 2004/2005. Después de no presentarse en varios entrenamientos, el técnico portugués decidió realizarle un control antidrogas. El futbolista rumano dio positivo en cocaína y fue suspendido durante 7 meses por la Federación inglesa y tuvo que pagar una multa de 20.000 libras. Por consejo de sus abogados, Mutu decidió no hacer un contranálisis debido a que el Chelsea hubiera podido reclamarle una indemnización. El futbolista jugó cedido en la Juventus, pero fue en la Fiorentina donde alcanzó su mejor nivel a las órdenes de Cesare Prandelli, que llegó a decir de él que era "uno de los mejores futbolistas" que el técnico italiano había entrenado. 

Maradona, reincidente

La carrera del que para muchos es el mejor futbolistas de la historia pasó por sus peores momentos al principio de la década de los 90. Maradona dio positivo en cocaína en 1991, cuando jugaba en las filas del Nápoles, y fue suspendido durante 15 meses. El castigo puso fin a su periplo italiano, y en 1993 fichó por el Sevilla. Apenas unos meses después de su fichaje, el 'Pelusa' volvió a dar positivo en efedrina tras el Mundial de 1994.