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REAL MADRID

Zidane confía en el equipo para poder encontrar la solución

El francés ha pedido a sus jugadores que reflexionen. Cree que la falta de intensidad física viene de una falta de intensidad psicológica.

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Zidane confía en el equipo para poder encontrar la solución

Zidane está preocupado por los cuatro empates consecutivos de su Madrid, pero no se está poniendo nervioso. Para nada. Hace falta mucho más para perturbar a este hombre que tantas cosas ha visto en el fútbol y que sabe que la temporada va a ser muy larga y llena de sorpresas. Esta mala racha le recuerda al pasado invierno, cuando después de cosechar dos empates fuera de casa ante Betis y Málaga se llevó el palo al perder el derbi ante el Atlético en el Bernabéu (0-1). Por ello no cree estar viviendo, ahora mismo, el peor momento de su joven carrera como entrenador del primer equipo. Y, sobre todo, sabe que se podrá encontrar rápidamente una solución a los males recurrentes del equipo. Es cierto que tuvo una charla con los jugadores nada más terminar, el pasado domingo, el encuentro frente al Eibar, y también es cierto que ha pedido que nadie se olvide del Madrid durante el parón de selecciones. Quiere que cada uno reflexione sobre lo que no funciona en el equipo y que ha provocado estos resultados decepcionantes.

Zidane tiene mucha autoridad, es consciente de que él es el jefe y el máximo responsable del equipo y no va a huir a la hora de dar la cara. Ha pedido reflexión y será el primero en reflexionar, junto con su gente de confianza. Sin embargo, cree sinceramente que nadie tiene una fórmula mágica y que esos problemas se arreglarán “todos juntos”. Pretende implicar a todo el grupo en la búsqueda de la mejoría y lo hace de forma inteligente. En un pasado reciente, ciertos técnicos señalaban públicamente culpables para salvarse a sí mismos. Todo lo contrario de un Zizou que, como ex jugador conocedor de la mentalidad de un vestuario, siempre quiere proteger a su grupo y no busca chivos expiatorios. Lo que tiene que decir lo dice en Valdebebas, lejos de las cámaras y de los micrófonos, y así ha podido ganarse la confianza de sus hombres. Viendo el calendario tan cargado de partidos, será casi imposible trabajar físicamente a la vuelta de los encuentros internacionales, pero el míster pretende que se haga un trabajo intelectual, un trabajo de visualización de la manera de jugar para que cada uno sea consciente de lo hay que hacer. La intensidad física que se ha echado en falta últimamente viene de una falta de intensidad psicológica. El remedio debe de encontrarse de forma colectiva y Zidane lo sabe mejor que nadie.