Danna Paola cuenta por qué dejó 'Élite' y qué pensó primero de los españoles

Toda una estrella en su país natal, la mexicana Danna Paola saltó a la fama en nuestro país tras formar parte del elenco de las tres primeras temporadas de 'Élite', producción española para Netflix que ha arrasado dentro y fuera de nuestras fronteras y en la que encarnó al carismático personaje de Lucrecia Montesinos, una de las estudiantes más admiradas -y temidas, de Las Encinas.

La cantante y actriz no había podido regresar a Europa desde hace un año debido a las restricciones de viaje provocadas por la pandemia, pero ahora, aprovechando su parada en España, se ha pasado por el plató de 'El Hormiguero' para hablar de su próximo trabajo discográfico, 'K.O.'. Pero la música no ha sido el único tema de conversación.

Y es que el presentador no pudo evitar preguntarle por su abrupta salida de la serie de Netflix, que pilló a muchos de los fans por sorpresa. "Fue duro, pero estaba también de lleno con la música y fue complicado llevar esa doble vida", ha explicado la artista, "necesitaba dar el 100 por 100 a la oportunidad que tenía de hacer música y tuve que decir que no a la cuarta temporada".

Volviendo la vista atrás, y recordando el tiempo que pasó en nuestro país, Paola también ha hablado de la impresión que le produjeron los españoles cuando estaba recién llegada. Y lo que ha destacado resulta cuanto menos curioso. "Al principio tengo que aceptar que creía que yo les caía muy mal", ha confesado, antes de explicar que ella se considera una persona "muy alegre y extrovertida", mientras que en España, en su opinión, la gente es mucho más directa y dice que no "a cualquier cosa" sin darle demasiada importancia.

La conclusión a la que ha llegado con respecto a esto es que se trata de una cuestión de "costumbres". "Los latinos, o los mexicanos, le damos muchas vueltas a las cosas y en vez de decir 'no', decimos: 'no es que mi perro, es que mi mamá, tengo un problema....'", ha reflexionado.

En su caso, la lección que sacó de todo esto fue positiva: "Aquí aprendí a decir que no y ha sido un alivio muy grande. Eso me ha ayudado también a estar más segura de mí misma, saber lo que quiero y lo que decido".