Feliciano, sobre la cuarentena con su mujer: "Ha sido una prueba de fuego"
El tenista, que se casó con la modelo Sandra Gago el pasado septiembre, ha hablado en 'El Hormiguero' sobre cómo han gestionado juntos el confinamiento.
'El Hormiguero' sigue conectando todas las noches de entre semana con varios invitados famosos que, desde sus casas, cuentan cómo están llevando estas semanas de encierro. Y pese a que la actual situación mundial está teniendo efectos negativos a todos los niveles en la sociedad, algunas personas están agradeciendo la cuarentena obligatoria por el hecho de tener la oportunidad de pasar más tiempo en casa con sus seres queridos.
Y el tenista Feliciano López parece estar en este grupo. El toledano charló ayer en directo con Pablo Motos y, aunque su tendencia es la de no profundizar demasiado en su vida personal, no tuvo reparos en hablar en esta ocasión sobre cómo han sido estas semanas de estrecha convivencia con su mujer, Sandra Gago, con la que pasó por el altar el pasado septiembre.
"Le decía a mi mujer que una de las cosas positivas ha sido poder disfrutar de mi casa durante varias semanas seguidas, que llevaba 20 años sin poder hacerlo", ha reconocido el tenista, antes de añadir lo siguiente sobre su día a día con la modelo: "Ha sido una pequeña prueba de fuego. Ella me ha podido acompañar a algún torneo. No a todos, pero sí a algunos. Hemos estado dos meses conviviendo juntos y la prueba ha sido superada, así que de momento no me puedo quejar".
Feliciano ha explicado también cuál está siendo su rutina diaria durante esta etapa tan extraña: "Me levanto temprano, me gusta madrugar. Me levanto entre las 7:00 y 7:30. Lo primer que hago: bajo a la cocina, me pongo a escuchar a Alsina, a las 8. Me gusta mucho escucharle mientras me tomo un café. Saco al perro, doy un paseo. Vuelvo y normalmente a las diez o así, estos días que tengo tiempo, me pongo a entrenar". El jugador ha contado que en su casa dispone de una bicicleta de 'spinning', mancuernas y una 'fitball', así que, en sus propias palabras, "hago lo que puedo".
Por último, y en lo que la vuelta a la normalidad se refiere, el tenista no se ha mostrado especialmente optimista con su ámbito profesional: "No soy muy positivo porque es un deporte muy global que se juega en muchos continentes diferentes. El mundo necesita estar abierto completamente. En el momento en que se abra un torneo sería justo que todos pudiéramos viajar. Creo que en el tenis vamos a ser los últimos en poder empezar a funcionar y poder jugar", ha manifestado con resignación.