Irina Shayk, pillada con el exnovio de Heidi Klum y Amber Heard
La modelo, ex de Cristiano Ronaldo y Bradley Cooper, ha sido fotografiada entrando en plena cuarentena en el apartamento de Vito Schnabel.
La vida privada de Irina Shayk siempre ha suscitado enorme interés en los medios de comunicación y el público, trascendiendo en ocasiones su propia fama como modelo. El historial romántico de la rusa incluye a estrellas de la talla de Cristiano Ronaldo y Bradley Cooper, pero desde su sonada ruptura con el intérprete a comienzos del verano del año pasado, poco se había sabido del ámbito sentimental de Shayk.
Pero parece que ahora la modelo ha vuelto a ocupar su corazón. O al menos, eso es lo que insinúa el diario británico The Daily Mail después depublicar unas fotografías que muestran a Shayk paseando por Manhattan junto a Vito Schnabel, conocido marchante de arte que en el pasado ha mantenido romances con otras celebrities como la supermodelo Heidi Klum o la actriz Amber Heard.
La pareja fue vista en las calles neoyorquinas pese a las estrictas medidas que ya ha tomado la ciudad para tratar de frenar el coronavirus (el estado de Nueva York es uno de los más afectados por la pandemia y se ha convertido en el epicentro de la infección en Estados Unidos). Tanto Shayk como Schnabel llevaban mascarillas, y ambos entraron juntos en el apartamento del coleccionista, otra desviación de las instrucciones sanitarias, que exigen que todo el mundo permanezca en sus respectivas casas y no se mueva ni salga más que para ir a la compra o atender necesidades urgentes.
En caso de confirmarse el romance, Schnabel supondría el primer novio de la modelo desde que se separó de Cooper, con quién comparte una hija de tres años, Lea De Seine. Pese a que su ruptura fue convulsa por el alto escrutinio a la que estuvo sometida por parte de los medios, que quisieron asociar el fin de su relación a la cantante Lady Gaga, la expareja ha dejado ver en los últimos meses que mantienen un trato cordial.
Por otro lado, Shayk habló recientemente sobre las dificultades de compaginar su vida profesional y su labor como madre soltera. Tras manifestar a la revista Vogue que "la vida sin Bradley es un terreno totalmente nuevo para mí", la modelo reconoció que le costaba encontrar el equilibrio y "que hay días en los que me levanto pensando en que no sé qué hacer porque creo que me estoy haciendo pedazos".