SU DIVORCIO CONTINÚA

Malas noticias para Arantxa Sánchez Vicario en su batalla legal con Josep Santacana

La extenista ha sufrido un revés en su guerra con el empresario ya que no ha sido admitida una demanda que presentó en Miami.

Arantxa Sánchez Vicario y Josep Santacana posando juntos en un evento cuando eran pareja.

Parecía que el polémico divorcio entre Arantxa Sánchez Vicario (47) y Josep Santacana había llegado a su fin el pasado mes de marzo tras la sentencia dictada en el Juzgado de primera instancia número 2 de Esplugues de Llobregat (Barcelona) que daba por cerrado su matrimonio, pero la extenista quiso que se reanudase y se resolviera en Miami (Florida, EE.UU), donde ambos residen, y ha sufrido un revés ya que seguramente no vaya a ver cumplido su deseo.

Como ya contamos en su día, Arantxa Sánchez Vicario prefería a la justicia norteamericana porque es mucho más estricta en el examen de las cuentas de cada uno de los cónyuges y una de sus máximas era intentar que se investigaran los movimientos de 34 millones de euros que ella aportó al matrimonio y que se han esfumado. Sin embargo, según ha revelado 'Informalia', la jueza del tribunal de Miami no ha admitido la demanda que presentó al declararse incompetente para ejecutar su divorcio y ha devuelto la pelota a Cataluña ya que ambos contrajeron matrimonio en esta Comunidad (en el año 2008).

"Es cierto, el divorcio se tramitará en España por el momento. La decisión del juez de Miami es recurrible y mañana o pasado tenemos una 'conference call' con los abogados de Estados Unidos para decidir si recurrimos o no, por el momento no podemos decir nada más", ha confirmado a 'Vanitatis' el abogado de Arantxa Sánchez Vicario, Ramón Tamborero.

Por lo tanto, todo apunta a que la exdeportista y Josep Santacana seguirán casados ante la ley hasta que la Audiencia Provincial tenga la última palabra, algo que quería el empresario y que sucederá en un plazo de un año y medio aproximadamente.

Además, el divorcio en sí no es la única causa que tienen pendiente ya que también está la custodia de los dos hijos que tienen en común, asunto que sí está en manos del Tribunal de Miami. En este sentido, 'Vanitatis' señala que esto es algo en lo que ambos están de acuerdo y que están consiguiendo mantener sus disputas al margen ya que tienen una especie de custodia compartida supervisada por un coordinador, "figura jurídica que no existe en España y que en EEUU sirve para limar diferencias entre progenitores y tomar decisiones en favor de los niños al margen de las disputas del matrimonio", explica el citado medio.