Djokovic, contra el reloj
El sorteo del cuadro del US Open se celebra el jueves y sólo un cambio de normativa respecto a su negativa a vacunarse contra la COVID o una exención sobre la campana le permitiría jugar. Peligran otros 1.200 puntos en su cuenta.
Tic, toc, tic, toc. El reloj corre inexorable en contra de la aspiración de Novak Djokovic de disputar el US Open (29 agosto-11 septiembre), que celebra este jueves el sorteo del cuadro en Nueva York. El serbio sigue entrenándose con la idea de viajar a Flushing Meadows (“me estoy preparando como si me estuviese permitido competir... cruzo los dedos”, escribía hace días en Instagram). Pero sólo una exención de última hora o un cambio sobre la campana de la normativa que exige la vacunación contra la COVID-19 para viajar a Estados Unidos podría salvarle. Como un mal presagio, hoy la organización del torneo publicó un cartel promocional con Nadal, Alcaraz, Medvedev, Kyrgios... Pero sin el campeón de 21 Grand Slams.
El US Open aclaró hace un mes en una nota que “la ciudad de Nueva York requiere que todos los trabajadores presenten un comprobante de vacunación antes de ingresar al lugar de trabajo (a menos que tengan una exención médica o religiosa que, para el US Open, debe haber sido revisada y otorgada antes de la llegada)”. Pero el Centro de Control de Enfermedades (CDC) de EE UU anunció el 12 de agosto que, tras asegurar que los vacunados y no vacunados serían tratados igual dentro de sus fronteras, revisaría las normas para viajes. Pero aún no lo ha hecho.
Djokovic (35 años) seguirá, pues, engordando la sangría de puntos este año. Comenzó el curso como consolidado número uno y ahora es sexto del ranking. Tras el vodevil de Australia, donde fue detenido y deportado y donde perdió 2.000 puntos, logró retener su título en Wimbledon, pero se dejó otros 2.000 debido a la sanción de ATP al torneo, al que le quitó los puntos por vetar a tenistas rusos. No jugar el US Open le supondría la resta de otros 1.200 (final). Fuera también de los Masters 1.000 de Indian Wells, Miami, Montreal y Cincinnati ahora mismo es 13º en la carrera hacia las ATP Finals (el corte está en el octavo), aunque no le preocupa porque si está entre los 20 primeros podría acudir al haber ganado un Grand Slam, según normativa ATP.
La situación en Nueva York es paradójica, pues sí pudo jugar en 2021 (el torneo estableció una burbuja) y no lo haría en 2022 con la pandemia bastante controlada. Su técnico,La reacción de Ivanisevic“Si estás vacunado pero eres positivo puedes entrar en Estados Unidos, pero te vetan si no estás vacunado y eres negativo”. “Es una tontería”, apoyó John McEnroe en FOX. “Que no pueda jugar es una locura”, dice el jugador John Isner. El tema ha entrado también en el debate político de la mano del senador republicano Rand Paul. “Es irónico no dejar entrar al mejor tenista del mundo por no estar vacunado y permitir que miles de inmigrantes (por la frontera sur) entren sin vacunar”, advierte.
Djokovic, firme en su postura antivacunas, se ha dejado ver estos días entrenando sobre pista dura en Serbia, en Liubliana asistiendo al partido de basket entre Eslovenia y Serbia o en un homenaje a veteranos de waterpolo en Belgrado. También afinando su físico con sesiones de capoeira (combina artes marciales y danza). Mientras, rivales como Rafa Nadal, que podría arrebatar el número uno a Daniil Medvedev en Flushing Meadows y aumentar su cuenta de grandes a 23, practica ya en las pistas neoyorquinas. Si nada cambia, Nole volverá a la competición en Valencia, en la fase de grupos de la Copa Davis contra España el 14 de septiembre. El reloj sigue descontando minutos en su contra.