Federer cae ante el 42º del mundo y se despide de Doha
El suizo desperdicia una bola de partido y pierde en tres sets ante el georgiano Basilashvili. Tras más de un año en blanco, sólo logra una victoria.
Fugaz. Así la fue la vuelta de Roger Federer al circuito. Nikoloz Basilashvili (42º del mundo) frenó al suizo (3-6, 6-1 y 7-5 en 1h:50) en su segundo partido en el ATP 250 de Doha. El campeón de 20 grandes retornó el miércoles a la competición tras 405 días parado y se despidió con sólo con una sola victoria, trabajada, ante Dan Evans. Pobre puesta en escena.
A Roger Federer, para quien jugar al tenis es "como montar en bicicleta" y eso no se olvida, le faltan kilómetros para ponerse ante un Tour. Doha se presentaba casi como un examen médico para ver cómo respondía su rodilla derecha, la que sufrió dos operaciones y debe sostener al borde los 40 años (los cumple en agosto) su asalto Wimbledon y los Juegos de Tokio este año. Y el físico pareció pasarle factura.
En el Khalifa International Tennis and Squash Complex, ante 1.000 privilegiados, Federer dominó a Basilashvili, un pegador frío, en la primera manga. Pero el georgiano no aprovechó tres bolas de break y se vio por dónde podían ir los tiros.
Federer, inseguro cuando debía sacar la pierna derecha para golpear de drive, bajó mucho su nivel a la par que Basilashvili entendió que si lograba alargar los puntos pondría al de Basilea en problemas. El segundo set vino, además, con lagunas al saque del helvético (sólo un 25% de puntos ganados con segundos) y dejó a su rival entrar en el partido.
Al trantrán, Federer oteaba y confiaba en un tie-break en el que podía hacer valer su experiencia cuando se encontró una bola de partido al resto con 5-4. No la aprovechó y además cedió el break a continuación. Invitó a Basilashvili a apretar el gatillo y este hizo blanco ante uno de los grandes. Disputará la semifinal contra el estadounidense Taylor Fritz (33º, 23 años), que se impuso a Denis Shapovalov por 5-7, 6-3 y 7-5.
El suizo, sin embargo, quitó hierro a su prematuro adiós. Contaba con él. "Es un paso importante para mí (jugar en Doha), porque todavía no estoy al cien por cien. Pero es en la hierba cuando quiero estarlo. Por lo tanto, es una derrota muy fácil de digerir", dijo. Ahora, debe decidir si juega la semana próxima en Dubái. Miami está descartado. Y, según dijo, será muy probable verle sobre la tierra de la campaña europea.