Novak Djokovic sigue adelante en el Open de Australia después de superar al canadiense Milos Raonic en octavos de final del torneo. Al serbio se le vio algo mejor de las molestias abdominales que sufrió durante su partido de tercera ronda ante Taylor Fritz y en el que logró la victoria a duras penas.

Djokovic confesó que la lesión podría provocarle daños mayores pero que los analgésicos le han ayudado a jugar sin dolor, aunque no sabe si tiene una lesión más grave. "Es una especie de apuesta. Eso es lo que me dijo mi equipo médico. Es muy impredecible. Podría causarme más daño que ahora, pero también puede ir en una buena dirección. Así que es algo que no sé y no creo que lo sepa hasta que deje de tomar calmantes. Mientras siga con una alta dosis de analgésicos, todavía podré soportar el dolor. Pero lo difícil de los analgésicos es que ocultan lo que me está pasando y puede ser posible que no lo sienta, pero podría tener un gran daño".

El serbio llegó a reconocer que si esta situación se le hubiera dado en otro tipo de torneo, habría abandonado a causa de estas molestias y que ahora mismo está priorizando su recuperación a la preparación de los partidos. "Si hubiera sido otro torneo y no fuera un Grand Slam me habría retirado, sin duda. Pero es un Grand Slam, quiero dar lo mejor y saltar a la pista y recuperarme. Unas horas antes de pisar la pista, durante el calentamiento, no sabía si iba a jugar o no. No golpee ninguna pelota de tenis ayer (por el sábado). Intenté aprovechar cada hora para recuperarme y darme una oportunidad para poder estar en la pista, algo que finalmente he hecho. Pero de alguna forma encontré una forma para ganar y eso es lo más importante. Ahora tengo otras 40 horas de descanso hasta el próximo partido, lo cual es bueno en un Grand Slam. Tienes un día y medio para descansar. No creo que entrene mañana (por hoy) y seguiré con mi rutina de recuperación para ver si las cosas mejoran".

Por último Djokovic cree que estas molestias no le causarán daños graves a lo largo de la temporada. "Hablé mucho con mi equipo médico y también con el del Open de Australia y todos tienen la opinión de que hay una mínima posibilidad de que me provoque un daño grave y me deje fuera del circuito bastante tiempo. Siempre existe el riesgo de que la lesión empeore, pero no creo que sea tan grave para poner en peligro la temporada. No sé hasta dónde voy a llegar con la lesión o lo lejos que llegaré en el torneo. Aún me quedan tres posibles partidos y será más difícil para mí en la pista".