Bombazo en Viena: Sonego barre a Djokovic y llega a semifinales
El italiano barrió al serbio de la pista: 6-2 y 6-1. Con un gran tenis, Rublev dejó fuera a Thiem, segundo favorito al título e ídolo local.
El tenis italiano atraviesa un momento dulce. Matteo Berrettini es el número 1 transalpino, Fabio Fognini el veterano, Jannik Sinner el prometedor futuro y ahora Lorenzo Sonego (Turín, 25 años) se ha confirmado como alternativa. El italiano bordó el tenis en el ATP 500 de Viena y no ante cualquiera. Barrió de la pista al mismísimo Novak Djokovic, que no pudo 'celebrar' de forma más amarga que acabará el curso como número 1 por sexto año en su carrera (sólo había perdido en 2020 por descalificación ante Carreño en el US Open y con Nadal en Roland Garros). El marcador habla por sí solo: 6-2 y 6-1. Sí, leyeron bien. Nole sólo pudo ganar tres juegos ante el vendaval de tenis de Sonego, cuyo portentoso drive, entre otras virtudes, está muy por encima de lo que dicta el ranking: nº 42.
El duelo se puso de cara para Sonego a las primeras de cambio ya que rompió de salida el saque del serbio. La incredulidad le acompañó a Djokovic a lo largo de ese primer set. El repertorio de muecas, brazos en jarra y andar cabizbajo, como ya le vimos este año en otras ocasiones, no presagiaban nada bueno para el de Belgrado. Encajó un parcial de 4-0 que fue un muro insalvable, pese a que lograse maquillar el parcial para evitar el rosco (6-2). Los números, como el algodón, no engañan: Nole firmó un paupérrimo 46% de puntos jugados con primer saque y sólo el 36% ganados con segundo servicio. Si a eso le añades más errores no forzados del serbio y un 86% de puntos ganados con primeros de Sonego, el resultado no puede ser otro que el de un buen repaso.
Y el segundo set arrancó del mismo modo que el anterior, con un break para Sonego que le permitió encarrilar el triunfo. Si alguien podía remontar un 6-2 y 2-0 adverso ese es Nole, pero en este encuentro no sacó a relucir su clásica versión de escapista. El punto de inflexión llegó en el interminable cuarto juego, cuando Djokovic no supo (o no pudo) aprovechar tres bolas de break para igualar la contienda. El estacazo de Sonego fue definitivo y tampoco se arrugó a la hora de cerrar el partido. Primer triunfo de Sonego ante Djokovic (nunca se habían enfrentado), o lo que es lo mismo, primera victoria para él ante un miembro del Big Three para llegar a semifinales... ¡como lucky loser! Sólo el tiempo dirá si ha llegado para quedarse...
Resto de la jornada
Y los batacazos de los favoritos no quedaron ahí. Empezando por el segundo cabeza de serie del torneo e ídolo local, el austriaco Dominic Thiem, que perdió en dos sets ante un Andrey Rublev que lleva un año sensacional: 7-6(5) y 6-2. Thiem se vino abajo tras ceder el primer parcial y el ruso no perdonó en el segundo ante un rival que todavía no parece haber recuperado su mejor versión desde que ganase el US Open.
Otro de los jugadores que llegaba con mejor cartel que su rival era Daniil Medvedev. El ruso ya pasó serias dificultades para llegar a cuartos de final y le pasó factura ante Kevin Anderson, junto con unas dobles faltas puntuales (4 por 0 del sudafricano): 6-4 y 7-6(5). El encuentro que cerró la actividad en Viena terminó con victoria de Daniel Evans (7-6, 4-6 y 6-3 a Grigor Dimitrov), próximo rival de Sonego.