Muguruza salva tres bolas de partido y pasa con furia a semis
La hispano-venezolana superó en un agónico partido a la letona Sevastova para sellar su pase a semifinales del WTA Elite Trophy. Se enfrentará a la estadounidense Keys.
Garbiñe Muguruza ya está en semifinales del WTA Elite Trophy de Zhuhai. La tenista hispano-venezolana tiró de garra para llevarse su segundo victoria en la fase de grupos ante la letona Anastasija Sevastova por 6-7 (4), 6-2 y 7-6 (1) tras dos horas y 44 minutos en una nueva remontada tras la que ya protagonizase ante la china Shuai Zhang el miércoles. Muguruza se llevó un partido en el que en varias fases estuvo desbordada por los nervios, llegando a discutir varias veces con su entrenador, y en el que logró levantar hasta tres bolas de partido para sellar su victoria en el tie-break decisivo. Se enfrentará por un puesto en la final a la estadounidense Madison Keys, que selló su pase pese a perder con la china Wang, ya que lo hizo sumando un set y salió ganadora en el triple empate de su grupo. La otra semifinal la disputarán Julia Goerges y Ashleigh Barty.
El partido arrancó con ambas tenistas defendiendo con éxito su saque hasta que en el cuarto juego Sevastova logró quebrarle el servicio a Muguruza para certificar el suyo y ponerse 4-1 en el marcador. Tras un tenso descanso en el que discutió con su técnico Sam Sumyk y protestó por la presencia de la cámara que la grababa, Muguruza reaccionó ganando su saque y recuperó el servicio perdido con Sevastova para igualar el encuentro con su saque (4-4). Ambas jugadoras lograron retener su saque aunque Muguruza sufrió para salvarlo en el duodécimo juego, donde tuvo que afrontar una bola de set en contra y donde tuvo que sudar ante la letona para forzar el tie-break. En el desempate, ambas tenistas empezaron rompiéndose el saque, aunque Sevastova ganó en el sexto mini-break el saque de Muguruza, que logró salvar otras dos bolas de set pero en la cuarta oportunidad Sevastova se llevó la primera manga ante una Muguruza que pagó su frustración con su raqueta y el banquillo.
El desahogo hizo aparecer a una Muguruza mucho más efectiva con su saque y también para afrontar el servicio de Sevastova, quebrando el saque de la letona con la primera bola de break que tuvo y consolidándolo con un juego en blanco con su saque. Muguruza siguió haciendo gala de su juego agresivo y rompió el saque de la letona en el cuarto juego para ampliar aún más la diferencia ganando su saque (5-0). La hispano-venezolana dispuso de una bola de break para cerrar el set pero Sevastova supo resistir e incluso le quebró el saque a Muguruza para recortar distancias (5-2). Sin embargo, Muguruza volvió a tirar de garra y en el octavo juego, con saque para Sevastova, logró quebrar su saque en el segundo punto de set del que dispuso para llevarse esta segunda manga por 6-2 y forzar el definitivo tercer set.
En la tercera manga Muguruza tuvo que remar tras perder su saque en el primer juego, ocasón que Sevastova aprovechó para consolidar la rotura. Sin embargo, Muguruza logró rehacerse e igualar el encuentro tras ganar su saque y romper el servicio de Sevastova en el cuarto juego. Con ambas tenistas defendiendo sus saques con éxito, Muguruza tuvo una situación difícil en el noveno juego, donde fue capaz de salvar dos bolas de break pero no una tercera que le permitió a Sevastova sacar para ganar. La letona tuvo tres bolas de partido con su saque aunque Muguruza volvió a sacar esa garra que le caracteriza para igualar el partido. Con ambas tenistas ganando sus siguientes servicios el partido se fue al tie-break, donde Garbiñe se mostró sólida con su saque y quebró el saque de Sevastova hasta en tres mini-breaks para llevarse la victoria y sellar su pase a las semifinales del torneo.