Rahm persigue la leyenda de Seve

Severiano Ballesteros (1980 y 83), José María Olazábal (1994 y 99), Sergio García (2017) y... Jon Rahm (2023). El Major más español tiene un nuevo socio. Un hombre elegido para la gloria. Rahm continuó la senda abierta hace 43 años por Seve, de quien siempre se ha considerado un heredero, y se enfundó la Chaqueta Verde, la prenda más prestigiosa del golf mundial. Justo el mismo día que el genio de Pedreña hubiera cumplido 66 años, Rahmbo se coronó en el Masters de Augusta, su segundo grande, que también es el décimo que vuela hacia España. Ha sido el mejor homenaje posible a Ballesteros. Estaba escrito que Jon ganaría alguna vez en este templo del golf, desde que lideró con solvencia el World Amateur Golf Ranking en 2015, desde que se hizo profesional en 2016, desde que ganó su primer torneo en el PGA en 2017, desde que accedió por primera vez al número uno en 2020, desde que ganó su primer Major, el US Open, en 2021… Cada golpe de Rahm iba destinado a convertirse en una leyenda. Como Seve.

Esta temporada 2023 parecía perfecta para el asalto, sobre todo en los lances iniciales, cuando ganó tres de los cinco primeros torneos del año. Su dominio sólo era comparable con las rachas históricas del mejor Tiger Woods. Una andadura difícil de mantener, como demostró el mes de marzo, que humanizó a un Rahm que venía disparado. A pesar del frenazo, el de Barrika partió el pasado jueves entre los grandes favoritos para conquistar The Masters. Así lo confirmó en la primera jornada, que cerró con siete bajo par, después de haber arrancado con un doble bogey en el hoyo uno. Ni ese mal comienzo, ni los parones tormentosos, taponaron a un jugador en dulce maduración, que soportó como nadie la presión, al contrario que su compañero de baile, Brooks Koepka. El vizcaíno empezó el último recorrido a dos golpes del líder y lo terminó con cuatro de ventaja. A lo campeón. Augusta tiene nuevo maestro.