Fran García es bueno

“A Fran García le falta maldad”, dijo esta semana su amigo del Rayo Vallecano Álvaro García, argumentando que el lateral no tiene el egoísmo necesario para hacerse un hueco importante en el primer equipo del Madrid. Aunque, seguramente, la intención de Álvaro era buena, sus declaraciones no le hacen ningún favor a su amigo porque puede parecer que lo tilda de flojo, apocado o falto de carácter, cuando en realidad Fran está haciendo lo que se esperaba de él cuando lo fichó el Madrid. Nadie lo imaginaba desde el principio como titular indiscutible, sino que se esperaba un acomodo progresivo, entendiendo poco a poco lo que demanda el juego del equipo en su puesto.

Ser lateral zurdo del Madrid es mucho más difícil que serlo en otro equipo, entre otras cosas porque la estela que dejaron los últimos dos dueños de ese puesto es deslumbrante. Lo conseguido por Roberto Carlos y Marcelo en esa banda va más allá de los títulos y los récords, tiene que ver con la magia de un estilo de juego que se convirtió en leyenda. Para acercarse a ese nivel, igualarlo es algo imposible, Fran necesita mucha confianza en sí mismo, atreverse más, sentirse seguro de o que hace, y para eso tiene que ir despacio y no equivocarse. Esa prudencia es positiva y valorada por sus compañeros. Como dijo el señor Ancelotti, no hace falta ser malo para que te acepten en el vestuario ni para triunfar en el Madrid.

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