Deschamps deja a Mbappé sin selección
Deschamps dio ayer la lista de Francia para esta inminente ventana-FIFA y no incluyó en ella a Mbappé. La decisión provocó el pertinente revuelo y las congruentes preguntas en la conferencia de prensa, ante lo que Deschamps estuvo evasivo. Dijo que era decisión suya (la anterior fue por petición del jugador) y, sin mencionar nada parecido a baja forma, dijo estar seguro de que recuperará su mejor nivel en poco tiempo. Francia afronta en esta ventana dos partidos: uno fácil, Israel en casa, y otro difícil, la visita a Italia, enemigo histórico. Un partido con el liderato del Grupo 2 de la Nations League en juego.
No se puede abordar este asunto sin recordar un antecedente muy próximo. En la última convocatoria, Mbappé pidió quedar exento por molestias musculares, petición que Deschamps respetó. Pero después de pedirlo jugó unos minutos contra el Lille y fue titular ante el Villarreal. A eso sucedió, justo la noche que Francia jugaba contra Israel, su episodio en Estocolmo, donde le salpicó un escándalo aún no aclarado, que empalmó con dos días en Córcega, todo ello disfrutando permiso del Madrid. Aquello tuvo enorme repercusión en Francia, donde Mbappé era más que una figura: era el capitán de la selección.
Francia, dicho sea de paso, ganó los dos partidos, de los que el segundo era la difícil salida a Bélgica. Un amigo francés muy conocedor de los modos de Deschamps me explica la no convocatoria como un castigo de este. El razonamiento sería: si no quisiste venir, y bien se vio que podías, y ganamos en Bélgica sin ti, no voy a darte ahora el gusto de que elijas cuándo sí y cuándo no. Un serio revés para Mbappé, degradado de capitán de Francia a no convocado por el seleccionador justo estos días en que el Bernabéu sufre duras derrotas y empieza a desesperarse por los numerosos goles fallados por él.