¿De qué te quejas, Arda?
Si hay algo que no sobra para los jóvenes que llegan a ponerse la camiseta del Madrid son ni minutos ni oportunidades. Por muy bueno que seas, por mucha calidad que tengas y por mucho que tu entorno te haga pensar que eres un megacrack, las únicas reivindicaciones válidas son las que demuestras en el verde. Y de esas, de momento, ha demostrado pocas el turco.
Es verdad que Carletto da la sensación de que no le tiene en alta estima, pero también es una realidad que cada vez que le ha tocado jugar ha sido un cero a la izquierda. Ver a Modric corriendo más que él para achicar los ataques del Leganés fue un sonrojo para un chaval que trotó por el campo con una indolencia preocupante.
Güler pasó de puntillas por el partido, arrastrando un cierto aire melancólico que rozó la apatía. Seguro que es muy bueno y que cada vez que juega con su selección la rompe, pero para exigir minutos en el club más exigente del planeta tienes que ofrecer mucho más de lo que está dando Arda hasta el momento. La calidad sin esfuerzo ni personalidad en el Madrid es humo.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí