Ferran saca el extintor en Frankfurt
Aunque ya ha pasado mucho tiempo y los estadios ultramodernos construidos para el Mundial 2006 no se parecen nada a aquellos viejos estadios, el infierno alemán estuvo a punto de engullir al Barça como en aquella noche diabólica de Kaiserslautern que salvó Bakero en 1992. Por momentos, el Eintracht estaba asfaltando al Barça con sus transiciones. Zarandeado, ya fue afortunado de irse 0-0 al descanso porque Sow falló un gol cantado y el VAR corrigió a Jovanovic, que había señalado un penalti en el que Busquets estuvo listo en la acción (tocó balón) y en la enérgica protesta, que activó a Van Boekel en la sala. Pero, nada más salir del vestuario, más vieja escuela alemana: golazo de Knauff desde la frontal. Un zapatazo brillante para un equipo vibrante. "Salían como demonios", definió con maestría Xavi.
El partido dejó claro, porque el fútbol es así de cruel, que el Barça de hoy ya tiene titularísimos como De Jong y Dembélé; y suplentísimos, como Adama. Ousmane y Frenkie iniciaron la acción del 1-1 de Ferran. El valenciano, con una acción finísima, de jugador de alto nivel, sacó el extintor en una noche que pintaba horrible para el Barça y en la que también merece una mención Eric Garcia. Sin Piqué, jugó con personalidad y valentía. Es un jugador con mala prensa, pero no se esconde. Esos suelen triunfar.