Alcaraz sigue su camino

Carlos Alcaraz ha logrado 22 victorias en sus 24 últimos partidos, 17 de ellas en los 19 que ha disputado en la presente temporada. Su racha le impulsa a la tercera posición del año en la denominada Race, únicamente por detrás de Rafa Nadal y Daniil Medvedev, y de Miami saldrá como número 11 o 12 del mundo en el ranking ATP, dependiendo de lo que haga este domingo en la lucha por el título ante Casper Ruud. El murciano de 18 años se ha convertido en el segundo tenista más joven que accede a la final de este Masters 1.000, sólo aventajado por el de casi siempre, Nadal, que lo hizo 15 días antes que él. Rafa, sin embargo, no ha podido alzar nunca este trofeo, y eso que ha jugado cinco finales, como tampoco pudieron abrazarlo en las suyas Sergi Bruguera, Carlos Moyá y David Ferrer. El torneo de Florida está maldito para el tenis masculino español. Arantxa Sánchez Vicario sí lo ganó en dos ocasiones. Alcaraz tiene la oportunidad de romper ese maleficio, pero si no lo consigue, no habrá que echarse las manos a la cabeza, porque todo lo que ha alcanzado hasta aquí continúa siendo excepcional.

En cada nuevo salto de Alcaraz, siempre aparece el nombre de Nadal. Y siempre nos preguntamos, precipitadamente, si emulará sus logros. Pero Carlos no es Rafa, sus estilos son diferentes, aunque trasmitan emociones similares. Más que ponerle un listón, más que mirar a la lejanía, hay que disfrutar del día a día de Alcaraz. Partido a partido. Porque el murciano no es sólo futuro, ya es presente. Este año sólo ha perdido ante el mejor jugador de la historia, Nadal, y ante Matteo Berrettini, de quien se desquitó un mes después en Río. En el cuadro de Miami ha tumbado a dos top-10: Stefanos Tsitsipas y Hubert Hurkacz. Hoy tendrá enfrente a otro, Ruud, a quien ya doblegó en Marbella en 2021. Y un nuevo reto: su primer Masters 1.000. Allá donde ningún español lo logró. Ni siquiera el más grande.