El PSG, dos derrotas en Francia de valor relativo
Tres semanas esperando la vuelta. Es complicado intentar extraer conclusiones de los partidos que ha jugado el PSG desde que se disputó la ida ante el Madrid. Los resultados, con una victoria y dos derrotas, no han sido positivos, pero seguramente hay que atribuirlo a la escasa motivación con la que la escuadra de Pochettino los afrontó. Incluso el hecho de visitar el pasado sábado al segundo clasificado, el Niza, no supuso un aliciente extra para una plantilla que sabe que será juzgada por lo que ocurra en el Bernabéu. El preparador argentino alineó en la Costa Azul a un equipo muy diferente al que competirá en la capital española hoy: se guardó a Kimpembe y a Nuno Mendes y además tenía las ausencias de Mbappé por sanción y de Achraf y Paredes por problemas físicos. Neymar y Messi, eso sí, fueron titulares, pero sufrieron para generar ocasiones de gol ante el muy buen bloque defensivo planteado por Galtier. El 1-0 final redujo la diferencia entre ambos equipos a doce puntos, un colchón que explica por qué los parisinos se podían permitir esta derrota.
La importancia de Mbappé. Que la gran figura parisina llegue con molestias al duelo decisivo es, evidentemente, una cuestión de gran trascendencia. Incluso en un contexto de importancia menor como el que se ha vivido en estos tres partidos se ha podido apreciar la diferencia entre un PSG con él y sin él. En la única victoria de esta serie, el 3-1 frente al Saint-Étienne, marcó dos golazos y firmó una asistencia prodigiosa. En Niza se le echó de menos, especialmente por su capacidad para eliminar rivales en conducción partiendo desde zonas exteriores. Si a última hora no le vieran en condiciones, la solución de Pochettino sería repetir el ataque del sábado: Neymar en la izquierda, Di María en la derecha y Messi de falso delantero centro. Con Mbappé recuperado, el argentino ex del Madrid sería el que se caería.
Pases filtrados de Messi. Al actual Balón de Oro se le está juzgando con severidad en la prensa gala. Se considera que su temporada no está a la altura de lo que su fama y su talento hacían presagiar. En la ida ante el Madrid, en su muy influyente sección de notas, L'Équipe le puso un 3 sobre 10, castigándole especialmente por el error en el penalti que detuvo Courtois. Sin embargo, ese mismo día firmó dos pases al espacio que dejaron a Mbappé y a Neymar solos ante el meta belga. Dos grandes acciones que no se convirtieron en asistencias sólo porque sus compañeros no las finalizaron en gol. En el siguiente encuentro de liga, la derrota por 3-1 en Nantes, le regaló al brasileño el único tanto parisino. Y frente al Saint-Étienne hizo lo propio en dos ocasiones con dos pases de fantasía para Mbappé. Es decir, incluso cuando su capacidad física le impide ser determinante, sigue contando con la calidad para encontrar huecos casi imposibles para habilitar a los demás.
Variación en el medio. Aunque Paredes, al igual que Achraf, ya está disponible, Pochettino podría modificar el centro del campo con respecto a la ida. El senegalés Gueye entraría por el argentino, retrasando su posición Danilo Pereira para ubicarse como medio centro posicional. Verratti seguiría ocupando el rol más ofensivo del trío de la medular. Esta estructura le permitiría al PSG ser un equipo más físico para intentar ahogar la salida de balón del Madrid.