La fragilidad del Atlético es crónica

Derrota cruel la cosechada por el Atlético en Sevilla, en un segundo tiempo donde los cambios le dieron energía y calidad, con Rodrigo de Paul, João Félix y Cunha, los del Cholo acabaron sucumbiendo por una jugada a balón parado, donde la fe y la convicción las pusieron los de Lopetegui. Es preocupante que aun siendo mejor que el rival, eso no te sirva ni para llevarte un empate, el ejemplo claro de una fragilidad que se está convirtiendo en crónica.

Porque con balón los rojiblancos dominaron todo el segundo tiempo, con ambición, por físico y con las apariciones de João entre líneas, bien acompañado por un Cunha que genera incordio al rival y soluciones a sus compañeros. La suma de minutos y la productividad del brasileño están siendo de las cosas más positivas de este Atlético.

Se empezó la temporada con tres vidas, Liga, Champions y Copa, pero a día de hoy la sensación es que ya consumió una. La distancia y las sensaciones hacen que el primer objetivo rojiblanco sea volverse a convertir en ese conjunto granítico.