La cantera exige atrevimiento

El Madrid comenzó hace años una estrategia de captar a los mejores jóvenes del planeta antes que nadie y, poco a poco, va dando sus frutos. Vinicius, Brahim, Rodrygo, Valverde, recientemente Camavinga... Todos están asentados ya en el primer nivel del fútbol europeo y alguno (seguramente varios) romperán en cracks de esos que valen más de 100 millones. Pero conviene no olvidar que esa es sólo una parte del plan. Para poder competir con los PSG, City o United, el Madrid necesita irremediablemente sacar a joyas de su cantera.

En los últimos años se han cambiado cosas en La Fábrica y aún queda trabajo por hacer. El Madrid tiene unas instalaciones únicas en el mundo y la capacidad de formar a los mejores jóvenes españoles desde niños. La clave está en darles oportunidades. A los que son buenos, hay que ponerles. Hasta ahora, en la cantera, los chavales (salvo contadísimas excepciones) juegan en la edad que les toca. Con esa política, mirando al máximo rival, Gavi estaría ahora en el Juvenil y Ansu Fati en el Barça B. La cuestión no es regalar oportunidades, pero tampoco hay que frenar las proyecciones. Si un chico de 17 años despunta, debe ir al Castilla y, si ahí también rinde, entrar en la dinámica de primer equipo o irse cedido. Lo que no puede hacer es ganar 7-0 cada fin de semana a equipos de la Comunidad de Madrid...