Fin al calvario de Pedro Ruiz
El canterano del Real Madrid ha vuelto a los terrenos de juego tras casi dos años de parón por lesión. Juega en el NEC Nimega neerlandés, cedido por el Marsella.
El español Pedro Ruiz volvió a jugar 21 meses y 10 días después de sufrir una grave lesión de rodilla -rotura del ligamento cruzado anterior, del menisco externo y del menisco interno- cuando militaba en el Real Madrid Castilla, y marcó en su estreno, en un amistoso con el NEC Nimega holandés, donde está cedido por el Olympique de Marsella. El espigado delantero, de 1,98 metros de altura, expresó su satisfacción con un emotivo mensaje en sus redes sociales, junto al vídeo de su gol frente al Bochum de la Bundesliga alemana. "Los momentos más duros de mi vida sin ninguna duda. Me he sorprendido a mí mismo muchas veces en este tiempo y he sido capaz de superar situaciones que nunca pensé que podrían pasarme a mí", comenzó. "Quiero dar las gracias desde aquí también a las personas que me han ayudado en este largo camino y muy, muy pesado. A los del día a día, en especial a mis padres y hermana, no puedo tener más suerte teniendo a la familia que tengo, habría sido imposible sin vosotros. No puedo estar más orgulloso de mí mismo. HE VUELTO", completó.
El sevillano Pedro, tras cuatro temporadas en la cantera del Real Madrid, se convirtió en el delantero titular de Raúl González Blanco en su primera temporada al frente del Castilla, primer filial madridista, hasta que sufrió la grave lesión de rodilla. Recuperación larga en la que tanto el futbolista como su entorno han ido con pies de plomo. Tuvo que pasar por quirófano por segunda vez a finales de 2020 para evitar futuras complicaciones, y 21 meses después volvió a los terrenos de juego. Lo hizo en el NEC Nimega holandés, donde estará toda la temporada cedido procedente del Olympique de Marsella francés. Fue una apuesta en verano del español Pablo Longoria, presidente del club, y decidieron en común recalar en una liga holandesa históricamente favorable para los delanteros y en la que busca jugar minutos para volver a coger confianza después de tanto tiempo sin jugar al fútbol.
Según pudo saber EFE del entorno de Pedro, lleva semanas entrenando al máximo nivel y los datos que refleja el sistema de geolocalización (gps) muestran que es el futbolista del equipo que más distancia corre y en picos altos de ritmo. Tras su primer gol, su siguiente objetivo es el derbi regional contra el Vitesse, cargado de tensión. En el vestuario del NEC Nimega apareció, antes del entrenamiento, una muñeca decapitada y una nota amenazante, contó a EFE su entorno. Y a largo plazo, con tres años de contrato con el Olympique de Marsella, contar con minutos regularmente para asentarse en la élite tras su calvario.