Muguruza acelera en la recta final
Garbiñe Muguruza despegó el año como un avión, con un título y dos puestos de finalista en sus cuatro primeros torneos, y quiere terminarlo a esa misma velocidad. Por medio tuvo altibajos en su rendimiento, sin el lucimiento de otras veces en los Grand Slams. Pero que la temporada no está siendo mala se confirma rápidamente con las clasificaciones de la WTA en la mano. Tanto en la carrera, que mide la actuación del año en curso, como en el ranking mundial ocupa la sexta posición. Eso revela una cierta regularidad, en un circuito tan loco como el femenino, donde 14 jugadoras diferentes han pisado las semifinales en los cuatro grandes, que, por supuesto, también han deparado cuatro campeonas distintas. La alternancia es enorme. No hay tenistas dominadoras como antaño.
Los buenos resultados dependen mucho del momento de forma, del aprovechamiento de las rachas. Garbiñe lo sabe. Y también ese equipo liderado por Conchita Martínez. Por eso han preparado a conciencia esta recta final de la temporada, igual que prepararon la inicial. Entonces alzó el trofeo de Dubái. Y ahora, de momento, ha hecho lo propio en Chicago, también un WTA 500. El título ante Ons Jabeur, tras remontar un set, pronostica que Muguruza se encuentra en una óptima situación para afrontar los últimos retos de la temporada, que no son pocos. Esta misma semana arranca Indian Wells. Y en noviembre asoman dos bellos desafíos. Primero, la Billie Jean King Cup, que es la Copa Federación de toda la vida, donde España tiene equipo para luchar por su sexto entorchado. La capitana, Anabel Medina, anunció este lunes la convocatoria, un grupo potente con Garbiñe al frente. Después vienen las WTA Finals, el torneo de maestras, que no disputa desde 2017. El tenis no termina en los Grand Slams. Hay todavía calendario para que Muguruza desprenda su mejor esencia.