Los jugadores no son trozos de carne
Estamos todos muy atentos a lo que pase con Mbappé, lógico por la dimensión del fichaje, pero Ancelotti tiene ahora otras preocupaciones basadas en lo que se le viene encima. Primero hay que sacar este sábado adelante el duelo con el Betis en el Villamarín, que últimamente ha dado varios quebraderos de cabeza a los madridistas. La temporada pasada se ganó sufriendo tras un penalti cometido sobre Borja Mayoral (2-3), pero hace dos (8 de marzo) se perdió en lo que fue el último partido antes del cierre de todo por la pandemia. Pero Carlo va más allá y sabe que ante el Celta, en el soñado ragreso al Bernabéu (11-S) puede sufrir tres bajas clave en su once titular: Militao, Casemiro y Valverde.
Entiendo que la FIFA haya querido sacar una tercera fecha en los parones para poder acoplar en el calendario la locura de competiciones que hay ahora en marcha a nivel de selecciones, pero están olvidando que los jugadores son personas y no trozos de carne. No se puede someter a un futbolista a la presión de defender el honor de tu país durante 90 minutos a todo trapo, luego meterle en un avión privado, cruzarse medio mundo por los aires y aterrizar en el destino apenas unas horas antes de volver a vestirse de corto para jugar a tope por el club que te paga. Encima, es el regreso al Bernabéu, algo especial para los hombres de Carletto. Es una locura.