Llegó como propina del traspaso de Bryan Gil y es el protagonista absoluto del inicio de temporada del Sevilla. Erik Lamela, un argentino de tremenda calidad que entre lesiones y lo que no son lesiones nunca confirmó lo que apuntaba tras el dar el salto a Europa, va camino de ser el enésimo resucitado en Nervión. Como ya sucediera con su compatriota Banega hace algunos años. Pocos entendieron aquel fichaje como pocos entendieron este verano que el Sevilla se desprendiera de un valor como Bryan Gil para apostar por alguien como Lamela. El futuro dirá lo que hacen uno y otro. De momento, Lamela ya ha dado seis puntos al Sevilla.

Jugó mal el Sevilla. Muy mal por momentos. Pareció valerle el empate en muchas fases del partido y sólo fue con algo más de ímpetu a por el triunfo en los últimos 20 minutos. Así no es sencillo ganar a nadie en la Liga, pero con jugadores de la calidad de los que tiene el Sevilla la moneda tiene más probabilidades de acabar cayendo por el lado de la cara. Mención especial para Koundé. Primero se rumoreó que ni viajaría y luego que se quedaría en la grada. Pues ni una cosa ni la otra. El francés volvió a ser titular, completó los 90 minutos y si alguien dudaba de su actitud, que revise cómo se partió la cara con todos los atacantes del Getafe. Apunta a ser la mayor venta de la historia del Sevilla, pero hoy es un jugador que defiende con tremenda profesionalidad al club que aún le paga.