Todos estamos mirando con lupa los posibles movimientos de Kylian Mbappé con la esperanza de que se abra la puerta de su fichaje por el Madrid. La lógica dice que cada día que pasa sin que renueve con el PSG le acerca un poco más al club merengue. Estamos ya a mediados de julio y la ausencia de firma del delantero francés en un nuevo contrato parisino empieza a provocar cierto optimismo entre los aficionados madridistas. Sin embargo, creo que nos estamos equivocando y que conviene relativizarlo todo. Porque, tal y como me lo confesó una persona cercana a Mbappé, nada impide a Kylian renovar con el PSG en octubre, diciembre de este año o febrero del 2022. No tiene por qué tomar su decisión este verano antes del cierre del mercado de fichajes y puede perfectamente tomar su tiempo para juzgar la competitividad de la plantilla que está confeccionando el club de la capital francesa.

Ampliar

Y ahí reside la gran ventaja sobre la cual pretenden jugar los responsables del PSG, empezando por Nasser Al Khelaifi, el presidente. Mbappé comentó un día que le gustaría tener a Wijnaldum como compañero y el club parisino lo acaba de fichar. Además han llegado estrellas como Ramos, Achraf o Donnarumma (y otras están muy cerca) para montar un equipazo que será sin ninguna duda el gran favorito para conquistar la próxima Champions. El dinero no es ahora lo que mueve las ambiciones del delantero galo. Lo que cuenta para él es su progresión y los trofeos. Así que la calidad de la nueva plantilla aparece como la mejor baza del PSG para que Mbappé decida quedarse y ampliar su contrato.