LaLiga ya es asunto de los Madriles

Tampoco el Madrid cede, de forma que LaLiga ya es un asunto de los Madriles. Sevilla y Barça han quedado atrás y ahora el Atlético sólo tiene que preocuparse del Madrid, que no es poco. Vuelve de Granada con un resultado bonito, 1-4, que se debió sobre todo a la diferencia de ambición entre los dos equipos. El Madrid persigue al Atlético con la ilusión del título, el Granada no persigue ya nada ni huye de nadie. Ha hecho una temporada larga y meritoria, con rércord de partidos en el continente y una campaña europea fenomenal. Le ha faltado meterse en plaza europea para el curso próximo, pero está satisfecho con sus notas.

En otras condiciones, con un público espoleándole (en todas partes hace una ilusión especial ganarle al Madrid) quizá hubiera luchado con más ardor. Pero no se dio, de modo que el único que se ventilaba algo, o mejor mucho, era el Madrid. Zidane renovó los laterales con Marvin y Miguel Gutiérrez y acertó, porque le dieron salud y velocidad en las alas. Miguel Gutiérrez se anotó un muletazo de cartel con el pase a Modric que abrió el primer gol. Marvin estuvo a punto de marcar el segundo, pero cruzó demasiado el balón. Desde casi el mismo punto lo haría Rodrygo, que al borde del descanso duplicó la ventaja con un tiro impecable.

Vinicius y Rodrygo ocuparon los extremos y resucitaron la manida comparación: el primero agita mucho pero termina mal, el segundo agita poco pero termina bien. Ninguno de los dos es a día de hoy acompañante digno de Benzema. Ni tampoco Asensio y Hazard, que les sustituyeron a la hora de juego, como hizo Isco con Valverde, que a su vez jugó de salida para dar descanso a Kroos. Con los cambios el Madrid tuvo un sesteo que le costó el 1-2, pero la emoción duró poco. El Madrid siguió buscando el partido y completó ese 1-4 que hará acostarse preocupado a Simeone. El domingo, Atleti-Osasuna y Athletic-Real Madrid. Esto sigue.