Nunca nos deis por muertos, reza el nuevo lema del Cádiz viralizado en la última semana por las redes sociales del club. Y lo cierto es que no hay mejor frase para definir lo que fue el partido ante el Barcelona. Tras cuatro derrotas consecutivas, los amarillos necesitaban volver a encontrar sensaciones y sobre todo, recuperar la sonrisa con un partido en el que las virtudes de los de Cervera volvieran a florecer. El punto sabe a tres por la forma en la que llega: el equipo recuperó su fuerte en la defensa, donde verdaderamente crece y se crece el Cádiz y el gol, de penalti, llegó en el último suspiro, cuando parecía que perder por la mínima ante el Barça y en el Camp Nou, iba a ser algo ‘bueno’.

Siempre hay que confiar en el Cádiz. Ellos están destinados a las grandes hazañas, por lo que el empate ante los de Koeman, no es ni mucho menos circunstancial. Ganar en Valdebebas a todo un Real Madrid; en San Mamés, al Athletic; en Carranza, al Barça y además empatar en el Camp Nou, no es casualidad. Este equipo sabe a lo que juega y se podrá llevar mil golpes que siempre se levantará. Ahora el calendario da un respiro. Se acabaron los equipos grandes y vuelve ‘la Liga del Cádiz’, donde todo se decidirá. El partido ante el Barça puede suponer un antes y un después para el Cádiz, un equipo en el que la lucha no se negocia.