Este Valencia sí es de playoff

Este Valencia Basket sí se parece al que quiere Ponsarnau, especialmente el de la primera parte. Fueron dos cuartos casi perfectos contra un rival que te había destrozado en la Copa ocho días atrás. Baloncesto desde el pase. Y desde el acierto, tanto de tres como de dos. Los taronjas borraron del mapa al Madrid desde la defensa. Tavares no sabía si ir o venir. Y sólo Carroll achicaba agua con una excelente carta de tiro.

Todo se fraguó de nuevo bajo la batuta de Van Rossom, MVP del partido, que acabó con 16 puntos y 8 asistencias. Y lo más importante, cuando el Valencia bajó algo la concentración y perdió más balones de los debidos, en la segunda mitad, el belga bajó pulsaciones y llevó de nuevo el duelo al carril adecuado. Siempre desde el basket coral: anotaron los diez jugadores que entraron en la rotación de Ponsarnau.

Este Valencia sí es de playoff. Habrá que luchar mucho aún en los nueve partidos que restan. El próximo duelo contra el Zenit en San Petersburgo es crucial. Pero desde la solidaridad en defensa, el baloncesto de pase y la inspiración en el tiro el objetivo estará más cerca. Ahora se trata de recuperar consistencia y equilibrar esos altibajos que estaban matando al Valencia. Ante los blancos también los hubo. Pero consiguieron revertirlos antes de que el Madrid se subiera al partido. Esa es la idea. Ahora toca instaurarla en el colectivo a corto plazo.