Mis nombres propios del Dakar

Carpetazo al Dakar de la pandemia. Como siempre en esta época convulsa, el primer éxito es que se haya podido completar sin mayores complicaciones, superando incluso un cierre de fronteras que hizo temer lo peor pocos días antes de su inicio. Arabia Saudí se afianza como un escenario ideal para esta competición, aunque la organización de ASO debe esforzarse en definir un recorrido que resulte del agrado general, muchos pilotos han vuelto a quejarse de una velocidad excesiva y ese es mal asunto para la seguridad. De la edición 2021 me quedaría con varios nombres propios, protagonistas que por una u otra razón han reclamado la atención general. El primero de ellos, Peterhansel. Ganador en coches que logra una gesta que se puede evaluar en estadísticas, pero sobre todo por la manera en la que entiende un desafío que parece creado a su medida. Carlos Sainz figura en la otra cara de la moneda, junto a Lucas Cruz se han topado con un muro de dificultades con la navegación capaz de anular su velocidad manifiesta. Y no olvidemos a Nani Roma, que con nuevo coche y copiloto ha exhibido la solvencia de los grandes del desierto, muy meritoria su actuación.

Entre las motos nos llevamos otra enorme decepción con Joan Barreda, la enésima. Parecía que este año sí, se le veía más centrado y convencido que nunca, pero una retirada nos vuelve a dejar con la miel en los labios. Es incomprensible que un piloto de su talento y experiencia presente un palmarés tan discreto en el Dakar, uno de esos casos en los que la capacidad no se traduce en resultados. Qué decir de Laia Sanz, dura como una roca, inquebrantable, capaz de reponerse a cualquier dificultad. De nuevo en la meta, que era lo importante, satisfecha con su logro aunque disgustada con un tipo de recorrido en el que no se siente cómoda. Sensacional Lorenzo Santolino, prestigioso piloto de enduro que se está adaptando a esta especialidad con acierto y llama a la puerta de uno de los equipos importantes: con una mejor moto, atención a su potencial. Y cierro este repaso, en el que sin duda faltan figuras destacadas, con Cristina Gutiérrez; tras quedarse sin coche se reenganchó al límite de tiempo en los buggy para confirmar que merece seguir creciendo en la especialidad. Si ya gana a etapas, por qué no aspirar a más…