La foto del mapa electoral del Barça
Números. A poco menos de un mes de las elecciones (si la pandemia no lo impide), los precandidatos a la presidencia del Barça compiten ferozmente en la batalla para alcanzar las 2.257 firmas. Según uno de los precandidatos, Agustí Benedito, las encuestas que maneja otorgan a Laporta un arco del 28-33%. Interesante. Siguendo su teoría, si unos 45.000 socios van a las urnas, Laporta tiene 15.000 votos asegurados. Cuantos más candidatos pasen el corte de firmas, más opciones tendrá de llegar al cargo con facilidad. Un uno contra uno, sin embargo, sería peligroso para la candidatura Estimem el Barça. 30.000 votos potenciales para un único candidato serían un caramelo para los antiLaporta. Pero no parece ese un escenario real a día de hoy.
Los perfiles. De momento, Laporta se ha comportado con un perfil de marcado carácter conservador. No quiere saber nada de una posible acción de responsabilidad contra Bartomeu, ha insinuado una foto de reconciliación con Sandro Rosell si accede al cargo y de su programa electoral no se sabe demasiado. Está haciendo más por no perder votos que por ganar. Pero a su viejo electorado, tanta contemporización le exaspera. Se consuelan pensando que el verdadera Jan dará la cara cuando sea proclamado presidente. Víctor Font, de momento, es el gran bajonazo del proceso. No ha podido ni asegurar a Xavi, base de un proyecto que se intuía más cimentado. Episodios como el de Jordi Majó han revelado, sin embargo, improvisación y dudas. La entrada de Laporta ha tenido unos efectos devastadores en su candidatura. Benedito se ha jugado un triple proponiendo la demolición del Camp Nou; y Jordi Farré mientras, es el antisistema de la campaña. Artífice de la moción de censura, es criticado por otros precandidatos por su oportunismo. No deja de hacer propuestas: tatuajes, pizzas, cuota gratis a los socios de más de 25 años de antigüedad, fin de las listas de espera para 9.000 socios. Es un culé de base. Si hubiera un trivial del Barça de los últimos 30 años entre candidatos se lo llevaría de calle. Su sede (Numancia, 63) es el punto con más socios del Barça en la ciudad.
Alianzas. Se espera la de Toni Freixa y Emili Rousaud. Freixa, con la bandera del llamado nuñismo sociológico, ha presentado a Lluís Carreras como director deportivo y no cree en Neymar. Rousaud, que soñó con una candidatura de consenso, sí ve al brasileño. A todo esto habla Messi. Su relato también puede decidir elecciones.