Sergio se la juega ante el Athletic
Se le acaba el tiempo al entrenador del Real Valladolid. Ocho jornadas y solo tres empates, es decir, tres puntos de 24. Un balance pésimo que deja a los blanquivioletas una semana más como colistas. El panorama no es bueno y cada semana que pase sin ganar aumentará la tensión y la ansiedad de un equipo que en la segunda parte de Villarreal demostró que no es tan malo como pareció en la primera. Con una alineación incomprensible, el equipo de Sergio tiró a la basura 45 minutos en los que se ventiló el partido. Después, toque a rebato obligado por las circunstancias y aparición de brotes verdes que dan pie a la esperanza. Es la segunda parte la que evitó que ahora mismo la petición de cese del técnico no sea un clamor. Sergio llegará al domingo y seguirá disponiendo de un respaldo admirable y ejemplar de Ronaldo y de Miguel Ángel Gómez, pero dudo que ese respaldo se pueda mantener si después de jugar con el Athletic, en lo que será el noveno partido de la temporada y el quinto en casa, se siga sin ganar. O se gana al Athletic o el cambio de entrenador deberá ser obligado y necesario. Sergio tiene que dar con la tecla ya.
Si el segundo tiempo de Villarreal puede ser un camino a seguir, pues que lo siga, pero que gane. Lo que a estas alturas se necesitan, juegue quien juegue y entrene quien entrene, son puntos. Todo lo que no sea sumar pronto de a tres será quedarse descolgados y quedar obligados a realizar una segunda vuelta extraordinaria. Y eso es lo que el club debe tratar de impedir. Si es Sergio el que va a revertir la situación debe hacerlo desde ya y si va a ser otro el encargado, cuanto mejor situación se encuentre, más posibilidades tendrá de lograr el objetivo. El domingo en Zorrilla va a ser la última oportunidad para Sergio. Ojalá la aproveche y pueda llegar hasta el final.
Mientras, sigue el silencio de Ronaldo. El presidente se marchó a Brasil el mismo día en el que se jugó ante el Real Madrid y no se ha vuelto a saber de él. Parece que ha llegado el momento de que aparezca, respalde a los jugadores y esté preparado para tomar una decisión, en el caso de que sea necesaria. La figura de Ronaldo no es una cualquiera. Estamos hablando del presidente, propietario y leyenda de este deporte. Urge su aparición para aportar tranquilidad y apoyo a técnico y jugadores y para constatar que es él en primera persona el que lleva los mandos del avión.
Será semana de tensión antes de un partido muy transcendente. Lo de ganar, para el Valladolid, es cuestión ya de necesidad. Y será semana, seguro, de ofrecimientos de entrenadores permanentes tanto al presidente como al director deportivo. La lista de parados ya la conocemos todos y el club también. Si Sergio cae, en ocho horas el Valladolid tendrá entrenador, no lo duden, es un club histórico y muy apetecible para casi todos los técnicos. Quien pueda llegar a venir es lo de menos ahora, entre otras cosas porque lo deseable es que no tenga que venir nadie. Por respeto a Sergio y porque es lo que deseo, no vamos a especular. Suerte el domingo y que llegue la primera victoria por fin.