Nadal, en tres cifras: 13, 20 y 100

El otoño no ha frenado a Rafa Nadal en su finca de primavera: Roland Garros. Tampoco el bravo Diego Schwartzman, que podía presumir de un antecedente peligroso para el balear: su victoria, hace veinte días, en el Masters de Roma. Más que alterar el ánimo del español, aquel tropiezo le sirvió de lección, tomó buena nota de los aciertos del rival y de sus propios errores para corregirlos en la semifinal de París, donde el argentino no tuvo opción hasta el tercer parcial. Demasiado tarde. A diferencia de entonces, el Peque se topó con un oponente mucho más rodado, que se ha plantado en la final sin haber cedido ningún set en todo el torneo, como ya hizo en otras cinco ocasiones. En el Grand Slam de tierra, los números de Rafa son abrumadores. La única duda en esta edición eran las nuevas condiciones que aportaba el cambio de fechas, ese frío que baja y endurece la bola. No es el escenario perfecto para Nadal, pero de momento lo ha solventado con nota. Falta el último duelo, el combate por el título, en una final que ya ha disputado doce veces y nunca ha perdido.

Nadal se juega mucho más que un título en Roland Garros. Hace tiempo que su lucha es por la eternidad, en una contienda galáctica frente a Novak Djokovic y Roger Federer. Ninguna época anterior enfrentó a tres estrellas de esta dimensión. En esa final de mañana, Rafa puede sumar su 13º título en París, o 12+1 que dirían los supersticiosos, para acrecentar una marca que ya era récord desde que sumó la séptima corona. También sería su 20ª victoria en un Grand Slam, con el que alcanzaría en la cima a Federer. El rey está a tiro. Y para redondear la faena, el balear sumaría su triunfo 100 en el grande francés. Esos son los números que estarán este domingo en liza: 13, 20 y 100. Y también el número 1, pero no el mundial, sino el de líder de la Historia. Cada vez más cerca.