La Mallorca 312 realizará pruebas PCR a los participantes
La cita balear de Milestone Series extrema las medidas de seguridad con un protocolo para evitar posibles contagios 48 horas antes de su celebración
No os cuento nada nuevo al deciros que la situación sanitaria se está poniendo fea. Por eso, algunos organizadores de las marchas más grandes de España intentan anticiparse a un recrudecimiento aún mayor, y más teniendo en cuenta que muchas de ellas se tuvieron que suspender en primavera para pasarse al otoño y tener opciones de celebración.
Es el caso de la Mallorca 312 (Milestone Series), que ha anunciado la realización de un protocolo muy profundo para, si las circunstancias sanitarias generales lo permiten, se puedan excluir posibles contagios. La prueba ya se suspendió el pasado 25 de abril -en pleno confinamiento- y pasó al 10 de octubre, y la intención de los organizadores es priorizar al máximo la seguridad para poder llevarla a cabo.
De ahí que en, en coordinación con las instituciones públicas y el Grupo Quirón, los organizadores han realizado este protocolo que incluye la realización de una prueba PCR a todos los participantes 48 horas antes para identificar posibles contagios y evitar la propagación del virus. De forma adicional, el protocolo incluye usar la mascarilla, mantener una distancia de seguridad y usar geles hidroalcohólicos
Tal como ha deslizado la organización en una nota de prensa, el objetivo primordial es "garantizar la seguridad de todos los participantes, del personal de la organización y los residentes en Mallorca". Además, para evitar aglomeraciones, "se han modificado el proceso de entrega de dorsales, las condiciones de la salida y los avituallamientos previstos", aclara la organización.
Ni que decir tiene que el esfuerzo realizado es realmente generoso. Tengamos en cuenta que la prueba cuenta con miles de inscritos, por lo que hacer PCR a todos ellos requiere una inversión enorme que les ha obligado a renunciar a una de sus mayores señas de identidad: la ruta de 312 kilómetros. Además del 'agujero' económico, el hecho de que se celebre en octubre hace que la falta de luz se pueda convertir en un problema para los participantes más rezagados. Se quedan, por tanto, las de 225 y 167 kilómetros.
Los organizadores, como no puede ser de otra manera, advierten también de que no garantizan la celebración de la prueba por más que pongan de su parte. Todo dependerá de la evolución que se produzca de aquí a octubre.