Tibu, en la senda de Zamora, Miguel Ángel, Casillas...
El dorsal número 1 del Real Madrid hace justicia a Thibaut Courtois, que se ha ganado por fin el respeto y el cariño de la crítica y de la afición..
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El Divino Zamora fue el primer galáctico del fútbol español y del Real Madrid. Con una presencia física imponente se ganó el cariño y la admiración de la afición, convirtiéndose en el mascarón de proa de este deporte en los difíciles años previos a la Guerra Civil. Con él se ganó la Medalla de Plata de los Juegos de Amberes en 1920 y siendo el dueño de su portería el Real Madrid, tras batir el récord de traspasos pagando 100.000 pesetas de la época al Español, conquistó sus primeras glorias al ganar dos Ligas (1932 y 1933) y dos Copas (1934 y 1936). Además, Zamora protagonizó varias películas (Por fin se casa Zamora y Campeones). Todo esto lo sabe Courtois, que ha vuelto a ganar el Trofeo Zamora que acredita cada temporada al portero menos goleado.
El número 1 hace justicia a Courtois, que se ha ganado por fin el respeto y el cariño de la crítica y de la afición. Todos se han puesto de acuerdo. El belga ha sido, junto a Ramos y Benzema, uno de los grandes artífices de la Liga 34. Tibu sigue la senda de los porteros históricos que desde niño vi dignificar esta camiseta, especialmente Miguel Ángel, García Remón, Buyo, Keylor Navas y, por encima de todos, Casillas. Iker también fue divino. Pero no era galáctico, era de Móstoles...
