Con el espíritu de Máximo Adriano
Hace unos días, recibimos la buena noticia de que nuestro capitán, Sergio Ramos, había sido padre por cuarta vez. El nombre del bebé causó mucho revuelo en las redes sociales, pero refleja la personalidad y la fuerza que irradia el camero en todo lo que hace en su vida. Máximo Adriano suena a emperador y a conquistador y eso es justo lo que necesita el Madrid, a pesar de la ausencia trascendente de su gran líder, en el soñado asalto al Etihad.
Me gusta que ayer el presidente repitiese la liturgia escénica que ya protagonizó al regreso de la tropa de Zidane tras la pandemia. El técnico y los jugadores sienten que la visita del jefe es una manera de decirles: "Está difícil, pero con vosotros nada es imposible". El Madrid disfrutó en su día de las incomparables santiaguinas de Bernabéu, pero es verdad que en el campo estaba un ganador imbatible como era Di Stéfano. En Mánchester faltará, porque ese es ahora Ramos, pero el sevillano viajará con ellos y seguro que antes de saltar al campo les transmitirá el espíritu de Máximo Adriano.