Boring Boring Barça

El Barça hizo un partido deficiente contra el moribundo Leganés. Que aburra a las ovejas durante largos ratos no es novedad con Setién, pero ahora que sus partidos son a las 22:00 horas por decreto televisivo, sus aficionados también las cuentan (las ovejas) para quedarse dormidos. Si alguien eligió el horario de los cuatro primeros partidos del Barça por motivos de prime-time ha podido generar el efecto contrario, zapping.

El Barça ganó al Leganés a cámara lenta, con un ritmo exasperante que no se le debería permitir a este grupo de futbolistas millonarios a los que salvó la primera parte un chaval que es un tesoro. Ansu es un futbolista elegido. Como ante Osasuna, Valencia, Inter o Levante, fue el de Bissau quien despertó a un equipo realmente aburrido en el que Rakitic, y especialmente Arthur, volvieron a naufragar de manera lamentable en el centro del campo.

El Barça no encajó el 0-1 de milagro, recibió cinco tarjetas en los últimos diez minutos de partido y sólo sentenció el partido cuando a Messi le dio un arrebato porque alguien le había molestado y se sacó de la chistera una magnífica jugada en la que se inventó un penalti. Del suspenso en esta noche insoportable de martes se salvaron muy poquitos. De ese equipo que te entusiasmaba y te hacía vibrar no queda nada. Algo debe pasar en este Barça cuando la mejor expresión que te sale para resumir su partido es "boring boring Barça".