A LaLiga le sacan otras dos lonchas

La reunión del sábado ha dejado como saldo la reforma del Decreto Ley de Transmisiones Deportivas, que le saca un par de lonchas más a LaLiga. Desde ahora, el 1 % que entregaba al CSD se convierte en el 1,5 %. Y el 1 % que destinaba a la Federación se duplica a su vez. La entente Lozano-Rubiales se cerró sobre Tebas, que a cambio obtiene la esperanza de que el campeonato se pueda completar y así limitar pérdidas. Ahora se espera que los jugadores puedan entrenarse desde alguna fecha de mayo para terminar LaLiga entre junio y julio, a ser posible a tiempo para salvar los campeonatos europeos. Si se abren fronteras, que esa es otra.

Bendito fútbol y bendito Real Decreto, tan denostado en su día por sospechas maliciosas, y ahora retocado en días de excepción... pero para siempre. Así ocurre que LaLiga, una entidad privada que agrupa a clubes privados, aporta al deporte más dinero del que los propios presupuestos del Estado destinan para subvencionar a las federaciones deportivas. Aparte, está la cantidad similar a esa que entrega a la Federación para fútbol femenino, fútbol base y demás. Y cabe recordar aquí el apoyo altruista de Madrid y Barça al baloncesto, cuyas secciones mantienen aunque no ingresan ni un tercio de lo que cuestan. Todo junto hace casi 170 millones.

Cosas que conviene tener en cuenta al juzgar al fútbol profesional. Son ricos, me dicen. Sí. Lo son porque la gente se gasta dinero en lo que quiere y se gasta mucho en fútbol. Pero ahora está bien administrado y ha devuelto en pocos años una deuda con Hacienda de 700 millones, paga anualmente 1.200, y del movimiento que se provoca a su alrededor Hacienda recibe 4.000 más. Al jugador que pretende regatear al fisco, que es verdad que se dan casos, se le cae el pelo, tanto da si se llama Messi o Cristiano. Y ahora los clubes renuncian a una parte del dinero que les corresponde para que les resulte más fácil abrir la tienda de nuevo.