La Cartuja, allá vamos, a la cuarta debe ir la vencida

A la cuarta tiene que ir la vencida. Porque ya van unas cuantas intentonas en el presente siglo: 2009, 2012 y 2015, antes de la de La Cartuja el mes próximo. Lo han intentado Caparrós, Bielsa y Valverde, pero ninguno pudo dar con la tecla porque se cruzó por medio un Barcelona en plenitud. No fue capaz el Athletic de reconciliarse con su pasado, con su antigua posición como monarca de Copas, destronado en la era reciente por el propio equipo culé. Este equipo ha sabido levantarse desde la agonía en un trofeo que parece enamorado de su firmeza en el riesgo. Fue un partido decepcionante, con los leones superados en intensidad y con un agujero negro en el juego aéreo, aunque mantuvieron a los tres centrales todo el partido.

El Athletic estuvo demasiado cargado de responsabilidad. Eso sí, contando los 180 minutos de la semifinal, su pase es justo. Tiene Ángel. Bueno, o tal vez José Ángel. Iribar. El viejo guardián de la meta rojiblanca que ahora alienta desde el palco. Yuri es el hombre de la Copa. Nunca se esconde y cuando inicia la carrera pocos se resisten. Sevilla, allá vamos. Con derbi vasco. Esta vez no está el Barça. No hay ganas de esperar a una quinta intentona.