El Cádiz se mueve como pez en el agua en ese fino alambre de ganar por la mínima. Aunque a más de un aficionado le va a terminar dando algo, esta temporada los amarillos se han llevado nueve partidos de 16 de esta manera, demostrando una increíble fortaleza defensiva cuando se ponen por delante en el marcador. Ante Las Palmas no podía ser menos. El equipo de Cervera tuvo la soga al cuello en dos ocasiones (con 0-1 y con 1-2), pero supo guardar la renta. Supo hacer del sufrimiento un arte.

Las Palmas tiró 26 veces sobre la portería de Cifuentes. La mayor parte de ellas desde fuera del área. Y esto hay que debérselo a la defensa. Porque si algo está destacando en el Cádiz esta temporada es su línea defensiva. De Cala, Fali y Mauro esta temporada, se podría hacer el ‘Manual del buen defensa’ para enseñar en las escuelas de fútbol. A esto hay que añadir a Iza y Espino, que se solidarizan con sus compañeros y arriman el hombro cuando la situación lo requiere. Y Cifuentes, que a sus 40 años, (se dice pronto) hizo ocho paradas contra los canarios, es el Zamora de la categoría y además tiene a los amarillos como los menos goleados. El Cádiz volvió a ganar y coge aire tras el bache. Sufriendo… Sí. Pero sabiendo hacer arte del mismo.