Un Madrid con goles y sin juego
Lo que son las cosas: el Madrid, que por falta de gol ha dejado escapar puntos que merecía, ganó por 0-3 un partido que jugó peor que otros en los que no marcó. Dos cabezazos de Varane, en sendos raros acercamientos al área, derrumbaron al Getafe y sacaron al Madrid indemne del difícil Coliseum Alfonso Pérez. Luego, con el equipo local ya aburrido y harto de todo, embelleció el resultado con un último gol, una preciosidad con arranque en la defensa, pase largo magnífico de Bale a Valverde, carrerón de éste y remate a puerta vacía de Modric, que acompañó la jugada. Un relámpago de belleza en un partido bronco y feo.
Como suele, el Getafe salió a jugar en el campo contrario. Asfixió la salida del Madrid, complicada más aún por la ausencia de Sergio Ramos. Ni Varane ni Militao inician la jugada con seguridad, y menos aún en ausencia del capitán. Zidane prescindió en principio de Valverde, buscando que el cuadrado Modric-Casemiro- Kroos-Isco se manejara mejor entre las apreturas par sacar el balón. Pero no. El Getafe les podía, salvo a Modric si acaso, y presionando y presionando fue goteando remates peligrosos. Courtois estuvo enorme en tres paradas. Él mantuvo vivo al Madrid, que sólo respiró con el primer gol, regalo de Soria, cerca ya del descanso.
Y, al poco de la vuelta, otro. De nuevo Varane, con intriga del VAR, que anduvo escrutando al milímetro si había o no fuera de juego. Para el Getafe fue el fin. Estaba jugando mejor, perdía dos a cero, no sabía por qué, y además estaba muy mosca con el árbitro, muy cobardica para pitar cerca de las áreas... y cerca del área en que se jugaba siempre era la del Madrid. No tiene nada que reprocharse el Getafe, simplemente el fútbol tiene estas cosas. En cuanto al Madrid, Zidane aprovechó el final para sacar a Jovic, Vinicius y Valverde, entre los que quien lucio fue, claro, Valverde. Como siempre. Es el gran refuerzo del Madrid de este año.