El deporte español entró en ebullición en la primera década del Siglo XXI. Ganábamos a todo, principalmente en las disciplinas más mediáticas: al fútbol y al baloncesto, al tenis y al ciclismo, en la Fórmula 1 y en MotoGP. Fue la Edad de Oro, de la que todavía hoy quedan rescoldos candentes. Como la vida del deportista suele ser corta, muchos de aquellos héroes se han ido retirando en los últimos años. Es un goteo inevitable. En 2017 lo hicieron Contador, Ruth Beitia, Capdevila, Higuero, Casado…. En 2018 fue el turno de Navarro, Pedrosa, Mumbrú, Rocas, Villaecija... El 2019 que termina no ha sido una excepción. Un buen momento para recordar a Xavi, Villa y Torres, a Calderón, a Javi Fernández, a Ferrer y Almagro, a Lorenzo, a Juanín García… Históricos del deporte, y no sólo español.

Villa y Torres formaron la delantera de La Roja, cuyo espíritu tiqui-taca personalizaba Xavi. Tres figuras decisivas en el Mundial 2010 y las Eurocopas 2008 y 2012. También en los éxitos de sus clubes. Tan imprescindibles como Calderón y Juanín en los dos primeros oros mundiales del baloncesto y del balonmano, en 2006 y 2005. España siempre luce en deportes colectivos. La serie de retiradas comenzó, sin embargo, en una disciplina individual de nula tradición. Superjavi dejó la competición en enero a lo grande, el día que sumó su séptimo oro europeo. David Ferrer también paró, estaba anunciado. Su grandeza fue erigirse como el mejor tenista en el mundo de los mortales, fuera de ese Big Three, a veces Big Four, formado por Nadal, Djokovic, Federer y Murray. El adiós más sorprendente lo protagonizó Jorge Lorenzo, el hombre que frenó la dictadura de Valentino Rossi. Todos se han bajado en vísperas de un año olímpico en el que se esperan muchas más despedidas… Pero ya habrá tiempo para ellas. De momento, sigamos disfrutando de los que se quedan. Feliz 2020.