La Euro 2020 ya tiene mapa. El sorteo de la fase final dibuja un camino aparentemente amable para España. Polonia, Suecia y la ganadora del playoff de la división B de la Liga de Naciones no parece lo más difícil posible de entre lo que había. Los polacos tienen a Lewandowski en el mejor momento de su carrera y han crecido mucho en ataque también con la irrupción de Piatek. Aún así, es la misma Polonia de estos años que ha llegado a fases finales pero nunca pudo dar un golpe encima de la mesa. En el Mundial, sin ir más lejos, fracasaron.

Parece más rival incluso Suecia. Cuartofinalista del Mundial y con un elenco de buenos jugadores jóvenes que están creciendo, ya fue rival de España en la fase de clasificación hacia la Euro y le puso en muchos apuros en el encuentro de Solna, aunque en el Bernabéu cayó con claridad. El último rival saldrá del ganador del playoff B. Los irlandeses aparecen como el rival más duro de entre los cuatro posibles, sobre todo porque si se clasifican serán locales -salvo ante España- y podrán quitar puntos a suecos y polacos.

La Roja tiene motivos para estar satisfecha. En un sorteo que escondía dos bombas como la Francia de Griezmann y Mbappé y la Portugal de Cristiano se pudo esquivar a los más fuertes. No habrá lugar para la relajación porque polacos y suecos son buenos equipos, pero lo lógico es pensar en que España estará en octavos. Es momento de preparar bien la cita, dejar trabajar a Luis Enrique y esperar que San Mamés sea una fiesta durante la Euro. Tiene todo muy buena pinta. Así que es hora de volver a soñar.