Keylor honra a su pasado blanco
El Madrid se marcó una primera parte antológica que no terminó en goleada por la memorable actuación de Keylor. El tico, competidor nato, agradeció la ovación de su ex-público con un ramillete de paradas espectaculares al alcance de muy pocos en el mundo. Su protagonismo pareció poner nervioso a Courtois que en la comparación perdió claramente el duelo de porteros.
Cuando el PSG se gastó un pastizal en pagar a Navas buscaba un objetivo claro: empezar la casa por los cimientos en busca del trofeo más preciado. Han acertado de pleno porque la Champions es el terreno que más domina un portero espectacular, sin tanta prensa ni ego como otros, pero con un rendimiento de súper clase en los momentos en los que a otros les tiemblan las piernas.