El VAR empeora a los árbitros

El sábado se produjo una jugada poco común en el Sevilla-Atlético: Koundé retuvo el balón entre las rodillas sobre la línea. Al árbitro no se le ocurrió más que pitar falta a Morata, que intentó patearlo. Bloquear el balón para que no pueda ser jugado es falta y seguramente González González la hubiera señalado caso de producirse en otro lugar del campo. Pero al ocurrir sobre la línea de gol, se bloqueó. Creo que ya he lamentado aquí alguna vez cómo el arbitraje ha ido eliminando el libre indirecto dentro del área, jugada prevista en las Reglas, que se veía con cierta frecuencia no hace tanto y que producía escenas singulares y de gran emoción.

Procedía sacar un indirecto colocando el balón en la frontal del área chica, con los sevillistas bajo la raya. No sé si el Atlético hubiera marcado o no gol, nunca fue fácil por el apiñamiento de jugadores, aunque sí he visto algunos. Pero hubiéramos gozado de una escena rara de ver y de peligro. Y, sobre todo, se hubiera respetado la Regla. El fallo de González González es un síntoma más de algo que comento a veces con Iturralde: el VAR está acomodando a los árbitros y a sus asistentes. Les está haciendo peores. Cuando ven algo raro se abstienen, pensando que sus colegas de la sala VOR ya dictaminarán si es preciso.

Aquí no había posible revisión, porque este supuesto no está en los protocolos del VAR, así que el error quedó. Otro menoscabo para la confianza en un sistema que esperábamos ver mejorado con el VAR, pero... El mismo sábado quedó colgada otra duda: ¿por qué no se revisó retrospectivamente la jugada que acabó en el penalti del Barça, en cuyo arranque hay off-side de Griezmann? Hace un año se le anuló un gol al Atlético por falta de Rodrigo en el origen de la jugada. Ahora me dicen que en el caso del Barça “la defensa ya se había colocado’’. Me parece una sutileza difícil de defender. O la justificación a posteriori de un error.