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Ignacio Camacho

Al Sevilla le sonríe la Europa League una vez más

los largos viajes en avión no pueden ser una excusa para Sevilla, Espanyol ni Getafe en su camino a los dieciseisavos de final de la Europa League.

No nos engañemos, los largos viajes en avión no pueden ser una excusa para Sevilla, Espanyol ni Getafe en su camino a los dieciseisavos de final de la Europa League. El sorteo de la fase de grupos fue benévolo para los tres españoles. Al Sevilla le tocó el grupo más fácil y Espanyol y Getafe lograron evitar a los grandes cocos del bombo 1 (Arsenal, Manchester United, Roma y Oporto), una oportunidad de oro para que los tres representantes de LaLiga pasen a la siguiente ronda como primeros de sus respectivos grupos. Si así fuera, vendría otro premio detrás de la clasificación: evitarían a los equipos rebotados de la Champions en la siguiente ronda.

La suerte ha sonreído a los españoles, y una vez más, la Europa League dio muestra de su gran amor por el Sevilla. No hay club por el que está competición sienta tanta pasión y viceversa. Están destinados. Como el Madrid con la Champions o el Barça con LaLiga en la última década. Como cabeza de serie, las opciones de que al club hispalense le tocara un rival duro eran escasas, pero PSV, Rennes, Eintracht, Basakhesir, Feyernood y Monchengladbach, por citar algunos, eran opciones que era preferible evitar. El beso de amor tuvo la forma del Qarabag, APOEL y Dudelange, algunos de los peores equipos de cada bombo. No hay duda de que al Sevilla, la Europa League le sonríe.