NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

LA PIZARRA TÁCTICA

La toma de control de Roca, Fabián y Ceballos

27/06/19 PARTIDO EUROCOPA SUB21 SUB 21  SEMIFINAL  SELECCION ESPAÑOLA ESPAÑA - FRANCIA  TERCER GOL DANI OLMO 3-1 PASE DE FABIAN RUIZ
MIGUEL MORENATTIDIARIO AS

Celebran España y Alemania el reencuentro con sí mismas en este Europeo Sub-21. A tenor de los visto, el combinado de Luis de la Fuente ha recobrado el espíritu que un día alzó al fútbol español y la selección germana ha reprogramado su tradicional atractivo de fiabilidad y contundencia. La cuota de posesión, tan valorada por unos y depreciada por otros, funciona como indicio. España ha dominado este apartado en sus cuatro partidos, mientras que Alemania, que en los últimos tiempos había revisado su estilo para hacerlo más combinativo, sólo lo hizo en la goleada contra Serbia (60%). El control del balón se antoja como un elemento fundamental para la Sub-21. Su rival resulta temible en las transiciones, habilitadas por los primeros toques de Waldschmidt y las conducciones de Amiri (o Richter) y Oztunali. La Selección no se puede permitir errores en la circulación que promuevan las contras de Alemania. El triángulo entre Marc Roca, Fabián y Ceballos –se han intercambiado 180 pases en los partidos ante Polonia y Francia– se debe imponer al que forman Eggestein, Neuhaus y Dahoud.

Ampliar

Destaca Alemania por su facilidad para traspasar líneas por disponer de muchos jugadores que atacan con velocidad el hueco libre. Los desmarques en diagonal de Amiri, un talento importante, desacoplan los sistemas defensivos. Tanto él como Oztunali disfrutan de la cualidad de fijar a los laterales rivales para salir por dentro o por fuera o esperar los desdoblamientos de sus compañeros. Dani Olmo y Fornals no pueden dimitir en el balance ante la presencia ofensiva de Klostermann y Henrichs. Waldschmidt es el hallazgo más señalado de Alemania en toda la competición. El delantero se maneja con la misma eficacia a campo abierto y en espacios reducidos. Vallejo y Meré serán sus carceleros y requerirán de la máxima anticipación en la lectura de las jugadas. Waldschimdt no es un delantero centro al uso como tampoco lo es Oyarzabal en España.

Ampliar

La decisión de Luis de la Fuente de apostar por el jugador de la Real Sociedad como falso nueve ha ensamblado el juego de España. Aunque no participe de forma directa en la acción, resulta determinante por su poder dinámico. Sus movimientos abren defensas; son causa de distracción. Tah y Baumgartl sufren ante este tipo de jugadores por sus problemas posicionales. Se sienten más cómodos con una referencia a la que sujetar. A Fornals y Dani Olmo les vuelve a corresponder asaltar esos espacios que libera Oyarzabal. España también necesitará de la jerarquía en los contraataques que ha demostrado en el torneo. El repliegue alemán se quiebra por los laterales. Es esta una vía de entrada para recuperar el trono europeo.