De la magia de 'Onti' a la catástrofe

De la esperanza al descalabro. El Málaga estropeó la eliminatoria y su futuro con una segunda mitad infame en la que tiró por el retrete casi todo lo cosechado en la etapa de Víctor como entrenador. El Málaga hizo un gran primer tiempo, con contundencia y dominio de balón. La magia de Ontiveros marcaba diferencias. Dio a Luis Hernández el 0-1 con un centro primoroso y anotó su clásico golazo marca de la casa, desde fuera del área. Un futbolista destinado a hacer cosas grandes si mantiene su cabeza fría y estas ganas de progresar.

Pero, de manera estrepitosa, el Málaga se descosió en la segunda mitad. Pedro empataba el partido. El equipo de VSDA perdió el buen guión del periodo anterior y seguía encomendado al arte de Onti, un cuchillo por su banda, que estrellaba una falta en el larguero. Keidi Bare sufría horrores cada vez que se topaba con Fede Cartabia. Y del 2-3 se pasó al 3-2 por un error catastrófico de la zaga malaguista, que dejó solo a Carlos Fernández. El desastre se consumó con el 4-2 de Borja Valle, a quien Iván Rodríguez dejó pasar y que se tragó Munir. Inconcebible debacle. El Málaga colgó ayer el cartel de no hay billetes en las taquillas de La Rosaleda. Y se espera que se superen los 28.314 espectadores que el 8 de abril de 2017 presenciaron el Málaga-Barcelona. Los malaguistas se juegan su reino y su futuro.