Djokovic retoma el poder
Novak Djokovic comenzó este lunes su 251ª semana como número uno del tenis mundial, la 29ª consecutiva en esta tercera etapa de reinado. El trono no ha peligrado durante la actual temporada. Al contrario, se ha asentado gracias a que Rafa Nadal, su perseguidor más inmediato, no está logrando defender su arsenal de puntos sobre la tierra batida. Aun así, Nole andaba preocupado, porque desde su triunfo en el Abierto de Australia había pasado un bache de resultados, con eliminaciones prematuras en Indian Wells, Miami y Montecarlo, en los que cayó en segunda ronda, octavos y cuartos de final, respectivamente… Unos puestos a los que no está acostumbrado, ni están a la altura de su liderazgo mundial. Madrid le ha devuelto a su sitio, justo cuando más lo necesitaba: con Roland Garros en el horizonte.
Todos los campeones tienen altibajos. Y la capacidad para salir de ellos aumenta su grandeza. Siempre hay un momento de no retorno, pero no se atisba en Nole. Así le ha ocurrido a Andy Murray, con lesiones irreversibles. Y Roger Federer puede estar en camino, únicamente por una cuestión de edad. Quizá también Nadal, tan zarandeado en su físico como lo ha estado Martín del Potro. A todos los hemos visto volver, pero algún día no lo harán. El caso de Djokovic este año ha sido un simple paréntesis, como ha demostrado en Madrid, donde batió al temido terrícola Thiem y al emergente Tsitsipas. El trofeo vino acompañado de su 33ª victoria en Masters 1.000, un tope que sólo comparte con Rafa. Un éxito que llega a dos semanas de París, donde buscará otra marca: su cuarto Grand Slam consecutivo.