Cristiano sí que tiene carta blanca
Da la impresión de que en la Juventus manda Cristiano. Mucho más que Allegri, lo cual no sorprende. Lo suyo suena a esa carta blanca de la que dicen que disfruta Zidane en su segunda etapa en el Real Madrid y que le permitirá fichar lo que le pida el cuerpo independientemente de lo que le pida a Florentino. Ese caballo de Troya a la inversa, es decir, ese mecanismo por el que Cristiano pretende pescar desde Turín a algunos de sus excompañeros en el Real Madrid, tiene tres piezas codiciadas. La de Marcelo parece enfriarse porque algunos dan por hecho que entra en los planes de Zizou para la próxima temporada, así que son Varane e Isco sus dos objetivos prioritarios.
Varane es tan del gusto del portugués que incluso llegó a ser su primera elección para el premio The Best (en el que Cristiano votaba como capitán de Portugal pero a cuya ceremonia no acudió) concedido el pasado mes de septiembre. Isco, mientras, respondería al perfil de jugador que se echa en falta en la alineación de los bianconeri visto que Dybala ha quedado en bruma que flota por el río Po. Pero en sus cinco temporadas juntos en el Bernabéu, Isco tan sólo fue asistente en 16 de los 249 goles marcados por Cristiano. Apenas en el 6,4%. Poco parece. Se ve que la fe de Cristiano no entiende de números.