Ver el Wanda Metropolitano casi lleno fue algo muy especial. La pena es que no pude vivirlo en directo al estar jugando con mi equipo, el Madrid CFF. Es tan importante lo que pasó el domingo. Antes del encuentro y después. La repercusión que está teniendo, no sólo en España sino a nivel mundial dice mucho del crecimiento del fútbol femenino. Está creciendo mucho en afición y, sobre todo, en mentalidad. Desde la AFE estamos luchando por los mínimos para que podamos jugar profesionalmente. Y ya tenemos el apoyo de la afición y de la sociedad. Este récord es un empujón más para demostrar que no es una moda, que el fútbol femenino ha venido para quedarse. En España hay una gran afición por el fútbol y nos estamos dando cuenta, por fin, que da igual que sea masculino o femenino, es compatible y lo vimos este domingo. Había un gran ambiente y esto le da normalidad a que las mujeres pueden hacer las mismas cosas.

Nunca soñé que podía pasar esto, jamás. Cuando empecé hace ya 19 años la sociedad era otra. La mentalidad ha cambiado, tanto la de la sociedad como la de la mujer, y la evolución es muy positiva. El fútbol femenino ha crecido de forma exponencial en estos últimos años, porque años anteriores había sido muy lento el crecimiento. Esto es el fruto del trabajo de muchos años. Yo me tuve que ir de España hace años para poder sentirme futbolista profesional en el extranjero. Por eso, hoy lucho con la AFE para que no pase más. Para que las mujeres de hoy y mañana no vean como una obligación irse de España para poder sentirse profesional, sino que lo hagan como elección. Hay que seguir trabajando, pero estamos en el buen camino...